La mayoría de los chilenos rechaza rendir honores al ex dictador chileno Augusto Pinochet (1973-1990) en caso que muera, según una encuesta difundida hoy por el diario La Tercera.

Mientras un 55 por ciento de los chilenos los rechaza, un 27 por ciento de los consultados estuvo de acuerdo con rendirle honores al ex presidente de facto, que se recupera favorablemente de un infarto al miocardio y un edema pulmonar que sufrió hace siete días y que lo tuvo al borde de la muerte.

La posible muerte de Pinochet reavivó en Chile la discusión sobre el tipo de ceremonias que deberían rodear sus exequias.

Sin embargo, según el estudio del diario, un 51 por ciento aprueba la idea de que Pinochet reciba honores como ex comandante en jefe del Ejército, cargo que ocupó durante 25 años (1973-1998), contra un 32 por ciento que opina lo contrario.

Por otro lado, un 72 por ciento de los encuestados rechaza declarar tres días de duelo oficial tras su muerte, frente a un 18 por ciento que se manifiesta a favor.

Un 45 por ciento de los chilenos señala que la presidenta Michelle Bachelet, que estuvo detenida junto a su madre durante la dictadura, mientras su padre, un oficial de la Fuerza Aérea, murió torturado por los militares, debería asistir a los funerales del nonagenario general.

La consulta se realizó telefónicamente entre el 6 y el 7 de diciembre y en ella se preguntó a 400 personas mayores de edad de las principales ciudades chilenas.

En los últimos meses, el Ejército ha señalado que en caso de que Pinochet fallezca, existe un procedimiento que se aplica a los ex comandantes en jefe, mientras la familia del nonagenario militar ha dicho que prefiere un funeral privado y desde su hospitalización ha circulado la versión de que el ex dictador pidió que, llegado el caso, se incinere su cadáver.

El portavoz de gobierno, Ricardo Lagos Weber, manifestó el pasado miércoles en una reunión con la prensa extranjera que "llegado el minuto, se tomarán (las decisiones) y harán los anuncios que corresponda", sin entrar en detalles.

Por su parte, la ministra de Defensa, Vivianne Blanlot, aseguró que el gobierno no va a tomar decisión alguna al respecto "mientras los hechos no ocurran".