Durante su presentación ante el juez de Pretoria, el atleta olímpico, Oscar Pistorius, rompió en llanto al escuchar la acusación de homicidio en su contra. La fiscalía lo culpó de haber asesinado a su novia modelo, Reeva Steenkamp el miércoles pasado y adujo denuncias previas de violencia doméstica. Ahora le toca al juez decidir si lo procesa o no.
Según publicó Télam, el abogado del deportista también apodado "blade runner" –por las prótesis en forma de cuchilla que utiliza en sus competiciones– pidió que su cliente fuera liberado bajo fianza pero el magistrado rechazó su solicitud.
Para la policía, la versión de Pistorius, es inconsistente: no creen que haya confundido a su pareja con un ladrón. Ya el mismo miércoles, día en que hallaron el cadáver de la modelo, la brigadier Denise Beukes había revelado a la prensa la existencia de “incidentes previos” de violencia doméstica en la casa del joven.
Pistorius había marcado un hito el agosto pasado en Londres, cuando se convirtió en el primer atleta con las dos piernas amputadas que participaba en unos Juegos Olímpicos. Había clasificado para las semifinales de la prueba de 400 metros lisos.
