Mariano Ruiz, el supuesto “cerebro” financiero del clan Los Monos, que fue detenido en agosto del año pasado en el barrio porteño de Recoleta quedó en libertad, aunque con restricciones, por pedido de sus abogados defensores y luego de pagar una caución cercana a los 200 mil pesos.

Ruiz había sido imputado por el juez Juan Carlos Vienna como “jefe u organizador” de la presunta asociación ilícita liderada por los Cantero y también como uno de los co autores del asesinato de Martín “Fantasma” Paz, el crimen que originó la megacausa judicial que no aborda el delito de narcotráfico.

La defensa del imputado presentó una apelación por esos cargo y al mismo tiempo un pedido de “sustitución de prisión preventiva” que fue aceptado por el juez tras el pago de la fianza.

La medida incluye una serie de restricciones que Ruiz deberá cumplir para mantener el beneficio: no podrá salir de Rosario, deberá presentarse en los Tribunales cada 15 días, por la noche deberá permanecer en su domicilio, entre otras reglas.

“La sustitución de prisión podría mantenerse hasta el dictado de sentencia”, explicó a Rosario3.com Carlos Varela, abogado de Ruiz.

Detenido en Recoleta

Ruiz fue detenido el 22 de agosto en el barrio porteño de Recoleta en el marco de la investigación judicial por el accionar de la banda de Los Monos en Rosario. Ese mismo día, la brigada de la división Judiciales de la Unidad Regional II incautó incautó cinco taxis a nombre de las esposas de “Guille” Cantero y Roberto “Monchi” Machuca.

El procedimiento en Buenos Aires estuvo a cargo de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) por orden del juez Vienna.

Vienna había dado con el paradero de Ruiz gracias a las escuchas obtenidas en mayo pasado las cuales ubicaban a Ruiz como una de las piezas fundamentales del negocio de la banda: se sospecha que había invertido alrededor de 40 millones de pesos en propiedades y mantenía un contacto fluido con Juan “Chavo” Maciel, ex el sargento de la Secretaría de Delitos Complejos, actualmente detenido.

Frente al juez, Ruiz declaró ser “comerciante” del automotor y aseguró tener cómo demostrar sus ingresos. Sin embargo, se negó a responder preguntas.

Quedó imputado por “haber sido parte en una asociación o banda de tres o más personas”. La acusación tiene que ver con su presunto carácter de "jefe u organizador, en la comisión de delitos indeterminados tales como tenencia y portación de armas de fuego de uso civil, de guerra y de uso prohibido, homicidios calificados, extorsiones, amenazas coactivas, cohechos y encubrimientos, la utilización de rodados y bienes inmuebles de alto costo y sin sustento económico aparente para su utilización, varios de los cuales fueron puestos a su nombre en calidad de propietario, todo con la utilización de dinero producto de actividades ilícitas (…) operando con una red de información que alcanza a integrantes de las fuerzas policiales”.