El concejal socialista Edgardo Falcón presentó un proyecto de decreto para que el Departamento Ejecutivo Municipal elabore un plan para la instalación de tecnología ahorradoras de agua en edificios municipales y públicos.

La iniciativa prevé además que los aparatos sanitarios de uso público dispongan de temporizadores u otro mecanismo similar de cierre automático, a fin de dosificar el consumo de agua limitando la descarga a un litro de agua, y un mecanismo de accionamiento de la descarga de cisternas de los inodoros que limite el volumen de descarga como máximo a seis litros y que disponga de la posibilidad de detener la descarga o de un doble sistema de descarga para deposcisiones líquidas o sólidas, según el caso.

Falcón también quiere que el municipio promueva el uso de mecanismos adecuados para permitir el máximo ahorro de agua en las construcciones de nuevas viviendas individuales y colectivas, a fin de que en 5 años el uso de estos dispositivos sean obligatorios.

El concejal de la bancada oficialista sostiene que la utilización de dispositivos eficientes en la edificación es una de las formas más sencillas, baratas y eficaces de conseguir ahorro de agua.

El edil socialista cita un estudio de la Organización de Naciones Unidas en el que se señala que 1.100 millones de personas no cuentan con acceso adecuado al agua potable, "muchos de los cuales viven en nuestra provincia y en nuestra ciudad".

Entre los considerandos de la iniciativa se destaca que si bien el planeta parece contar con una fuente ilimitada de agua, el 97% de ésta es salada y potabilizable solo mediante complejos procesos, mientras que nada más el 3% restante es dulce y potable y de este porcentaje, solo el 23% se distribuye en lagos, ríos y acuíferos subterráneos, mientras que el resto, el 77%, se encuentra en los glaciares y casquetes polares.

Para el edil “no hace falta esperar mucho para que la riqueza de un país sea medido en litros y no en distintas monedas”.