Elisa no consigue salir del asombro. Hacía pocos minutos que el presidente Mauricio Macri se había ido de su casa y del galpón donde funciona su pequeña y mediana empresa de encomiendas, ubicada en 24 de septiembre y Cafferata, en el corazón del barrio 5 esquinas. Le regaló una visita relámpago en medio de su estadía en Rosario, en el marco de la celebración del Día de la Bandera, luego de que la mujer y su esposo Jorge le mandaran una carta contándole su necesidad de adquirir un furgón para ampliar sus horizontes comerciales.

En diálogo con el programa A Diario (Radio 2), la mujer precisó los detalles de lo que sucedió puertas adentro del galpón al que Macri ingresó, ramo de flores en mano, dejando afuera un fuerte operativo de seguridad que sacudió la tranquilidad de feriado en este barrio del sudoreste rosarino. Los vecinos al saber de la presencia presidencial en la zona, salieron de sus casas a recibirlo, gritando a viva voz la frase “Sí se puede” a modo de bienvenida. También habló en De 12 a 14 (El Tres) y contó que la primera dama le cebó mate (ver video).

Es que Elisa había recibido ayer una llamada de Presidencia que le había adelantado algo. Pero no, concretamente, la presencia del mismo Mauricio Macri en su casa. Por lo tanto, fue una verdadera sorpresa verlo entrar por la puerta. “Con mi marido Jorge, tenemos una empresa de encomiendas, un servicio puerta a puerta que empezó en febrero, trabajamos en esta parte del galpón, estoy reacondicionando mi oficina. Se trata de un nuevo proyecto al que le ponemos todas las pilas y las garras”, se presentó.

Luego, contó que le escribió una carta a Macri contándole la historia detrás de este emprendimiento: “Nunca pensé que iba a causar tanto revuelo, anoche le decía a mi nuera ´quién me mandó`. Estaba nerviosa aunque no sabía si iba a venir o no el presidente. Mi nieta de 17 no me lo va a perdonar porque se quería sacar una foto con él”, deslizó.

“Fue una emoción muy grande, es la primera vez que lo veo. Tuve el honor de compartir mates y facturas”, señaló y agregó que durante los minutos que el primer mandatario estuvo en el lugar, charlaron sobre la inseguridad, la situación general del país y también de las necesidades de su empresa. Al parecer, a Elisa y a Jorge les va bien pero precisan expandirse para lo cual deben comprar un furgón. “Le comenté que lo necesito pero no creo que lo haya tomado como un pedido porque en ningún momento nos prometió nada en absoluto”, respondió a la consulta del periodista Ciro Seisas.

“Es un momento duro, al país todavía le falta pero también digo que falta mucho trabajo, que hacen falta más emprendedores, que a la gente que le va mal que le busque la vuelta. Nunca nos dimos por vencidos y ahora estamos con este desafío nuevo”, remarcó y terminó: “Todo lo hacemos trabajando, sólo le contamos sobre nuestro proyecto”.