El fiscal de Homicidios Dolosos Adrián Spelta afirmó este viernes que en las manos de una de las dos víctimas fatales de una persecución policial que finalizó en Callao y Arijón se encontraron partículas compatibles con disparos. Además, señaló que hasta el momento no está claro si las balas que partieron de armas policiales corresponden a una misma arma de fuego.

En conferencia de prensa, Spelta manifestó que ya llegaron los resultados de los peritajes hechos a los celulares de las personas involucradas, el informe de "armería central por la propiedad de las armas y del microscopio electrónico de barrido hecho por el Conicet, que determinó que una de las víctimas tenía partículas características en sus manos". 

"La evidencia objetiva indica que (David Ezequiel) Campos tenía en sus dos manos partículas con sustancias que determinan si existió un disparo", comentó. Para corroborar si efectivamente efectuó un tiro se deben aguardar medidas que aún están pendientes.

Además, el fiscal agregó que restan pericias en el marco de la investigación como las muestras de sangre del personal policial y de las víctimas que fueron llevadas a Salta, para saber si alguno consumió drogas. También falta la pericia balística.

Spelta destacó que las autopsias de las víctimas indicaron que el cadáver de David Campos tenía cuatro orificios de bala y dos proyectiles dentro del cuerpo. En tanto, Alejandro Medina tenía nueve impactos de arma de fuego y cuatro proyectiles en el interior del cuerpo. "No está claro si los proyectiles corresponden a una sola arma", enfatizó.