Este lunes 7 de agosto se vuelve a celebrar San Cayetano, el patrono del Pan y el Trabajo de la iglesia católica. En Rosario, como ocurre todos los años, desde muy temprano había gran movimiento en la parroquia de Buenos Aires al 2100, donde muchas personas concurrían para pedirle y agradecerle al santo. A propósito de este acontecimiento, el arzobispo de la ciudad, monseñor Eduardo Martín, lo puso en el contexto de la situación laboral a nivel nacional y de las elecciones primarias que se llevarán a cabo el próximo domingo.

Monseñor Martín habló este lunes en el programa A Diario (Radio 2), donde consideró que “el trabajo es una de las condiciones esenciales de la condición humana, para el sostenimiento de la familia”.

El religioso aseguró que “hoy estamos pidiendo especialmente que ilumine a los gobernantes para que pongan todo su empeño para lograr el trabajo digno que merece todo ser humano”.

El arzobispo local luego reconoció: “Yo creo que un poco se ha agudizado la crisis económica, aunque no creo que haya caído de manera estrepitosa”. Y después confió que “los sacerdotes de los barrios nos dicen que hay menos trabajo, menos changas; no estamos viviendo el mejor tiempo en ese sentido”.

Eduardo Martín fue muy cuidados en sus comentarios, ya que tuvo muy en cuenta el clima electoral que se está viviendo en el país: “Pasa que estamos en época de elecciones y a veces se busca hacer hincapié en cuestiones para captar el voto, tanto de la oposición como del oficialismo”, dijo.

“Yo creo que hay que tener más amor a la verdad; la pobreza estructural no la ha podido bajar ningún gobierno; los que están ahora no pueden, los que estuvieron antes tampoco pudieron; entonces seamos un poco más humildes y busquemos soluciones de verdad”, aseveró.

A continuación, monseñor Martín reconoció que “siempre está la tentación de utilizar a San Cayetano en función política o electoral”. Y remarcó: “Queremos estar cerca de todos los que sufren, de los más necesitados”.

Por último, el arzobispo de Rosario habló de la relación de la curia argentina con Francisco: “Yo creo que es muy buena. El Papa nos desafía permenantemente, nos indica el camino de salir de cierto acomodamiento y salir a caminar. Eso es interesante, porque si no estaríamos todos sentaditos en nuestro sillones sin movernos”, finalizó.