Aunque el saber popular señala que tener una mascota suele mejorar la vida del dueño, una experta británica señala que en realidad esta máxima se aplica a quienes tienen perros en su casa y no a los que adoptaron gatos.

Una psicóloga de la Universidad de Queen, en Belfast, afirmó en un reciente artículo escrito para una publicación sobre Psicología Mental, que los dueños de perros tienden a contar con una menor presión sanguínea y colesterol. Además, aseguró que las “caminatas” regulares con dichas mascotas serían parte de la diferencia.

Según bbcmundo.com, la doctora en cuestión es Deborah Wells, quién revisó decenas de investigaciones previas que se enfocaban en cómo los dueños de mascotas eran más saludables. Así, logró confirmar que quienes poseen una mascota tienen mejor salud que la población en general.

Sin embargo, la investigación sugirió que tener un perro ejerce una influencia más positiva que si se cuenta con un gato. Además de los beneficios sanguíneos y en los niveles de colesterol, los dueños de perros padecen menos enfermedades y problemas médicos serios.

También se sugiere que los perros ayudan en la recuperación de padecimientos serios como los ataques al corazón, y actúan como una "alerta anticipada" para detectar un inminente ataque epiléptico.

La doctora Wells asegura que aún no es totalmente clara cuál es la precisa razón por la que surgen los beneficios. "Es posible que los perros puedan promover un mejor estado de salud alejándonos del estrés, uno de los factores de riesgo que más se asocian con una salud en decaída”, arriesgó.

"Tener un perro también puede llevarnos a incrementar nuestra salud física y facilitar el desarrollo de contacto social, que podría entonces reforzar la salud humana, tanto física como psicológicamente, de un modo más indirecto".