Desde hace dos semanas los trabajadores de Alloco mantienen un enfrentamiento con la firma que les adeuda cuatro meses de salarios y dos aguinaldos. El viernes pasado llevaron el reclamo a las puertas de Tribunales, este miércoles a las de la sede de Gobierno donde cortaron el tránsito en Santa Fe y Dorrego. Exigen respuestas del gobierno provincial y nacional.

Consultado por el móvil de Radio 2, Diego uno de los delegados de la empresa que fabrica maquinas herramientas para la industria aceitera explicó que desde que Marcelo Markous se puso al frente del negocio el año pasado, sus 200 empleados vieron cómo a medida que pasaba el tiempo se llevó a Alloco a una “situación de abandono total”.

“No se compran materiales ni insumos”, criticó el operario que pidió “se agilicen los Repro”, los Planes de Recuperación Productiva, subsidios del gobierno nacional que otorgan 600 pesos a cada trabajador. Pero también, exigió una ayuda por parte de la provincia y mayor involucramiento de parte del Ministerio de Trabajo.

“Hay compañeros que no pueden pagar los alquileres y los están por desalojar”, lamentó Diego.

Antes de pasar a las manos de Markous, la metalúrgica villagalvense pertenecía la multinacional Demest Ballestra, con sede en Bélgica. Por 50 años era una de las principales proveedoras de insumos metalúrgicos para la industria aceitera y la única de Latinoamérica; aunque en el último tiempo sus balances comenzaron a evidenciar déficits y ahora, según sus trabajadores, su nuevo dueño parece querer llevarla camino al vaciamiento.