Con tres días de diferencia y a 15 cuadras de distancia, otra panadería de barrio Echesortu fue blanco de un ladrón que actuó a cara descubierta y se alzó en cuestión de minutos con la recaudación del local. Ocurrió este miércoles alrededor de las 15.30 y en Mendoza y Valparaíso, muy cerca de la panadería de Mendoza y Ovidio Lagos que el domingo sufrió un asalto similar. Este jueves los comerciantes de Echesortu se reunían para pedir seguridad. En las últimas semanas robaron al menos seis negocios de distinto rubro. 

Las imágenes que muestran la secuencia fueron enviadas por Ariel, uno de los empleados del local que como otros vecinos del barrio está preocupado por la inseguridad. En ellas se ve la cara del delincuente que entra al local como un cliente más, espera que la mujer delante suyo termine de pagar y una vez que ésta se va, se acerca a la cajera y la amenaza con un arma.

Para entonces Ariel, que había adivinado las intenciones del hombre, ya buscaba ayuda en la calle.

La secuencia fílmica termina con el ladrón saliendo de la panadería con toda naturalidad, con un paquete en manos, como si acabara de comprar las facturas para el mate.

Sin embargo, la historia no terminó ahí. Ariel logró avisarles a dos policías que patrullaban la zona de a pie y éstos esperaron al ladrón en la puerta de la panadería. Sin embargo, lejos de mostrarse preocupado, el ladrón se rió delante de los oficiales y echó a correr.

“Lo corrimos cuatro cuadras con el policía pero se escapó”, lamentó el empleado. “El policía me dijo `no podemos hacer nada´”recordó.