Cris Morena habló por primera vez de la muerte de su nieta Mila Yankelevich quien murió en un trágico accidente en Miami el pasado 28 de septiembre. 

En su reciente visita a Sería increíble (OLGA), donde presentó el primer tráiler de la segunda temporada de la serie Margarita, Cris se animó a tocar el tema. En el ciclo, contó que era la primera nota que daba desde la muerte de Mila y, con la voz entre cortada, aseguró que no sabría cómo explicar cómo hizo para animarse a hablar.

“Es un recorrido complicadísimo, porque me importa mucho mi hijo Tomás, Sofía y mi nieto Inti, que viven en Miami. Me importa mucho el cuidado de ellos, que estén juntos y apoyándose. Como yo tuve una experiencia igual a la de mi hijo… además fue el mismo día, el mismo número”, se lamentó.

“Mila está permanentemente con nosotros. A veces es doloroso, a veces es una sonrisa, a veces es lo que yo siempre hable de Romina, que se me aparecía de una forma extraña y me mandaba señales. A Tomás y Sofi les pasa lo mismo con Mila, y a mí me importa muchísimo el dolor de ellos, más que el mío”.

En un momento de sinceridad, la reconocida productora aceptó que, afortunadamente, la tragedia la “agarró en un momento de inmensa felicidad”.

“De un momento personal y de todo mi equipo, de mucha grandeza, de mucha integridad, de mucha alegría, estábamos en un momento plenísimo y eso me ayudó un montón. Es una mezcla tremenda de dolor e inmensa felicidad”, agregó, quien está en pleno auge de su nueva serie.

“Yo pienso que el alma no muere y que ella está en otros planos. El drama de los seres humanos es que quiere entender todo, el por qué y el para qué, y aparece mucho más tarde. Por qué se abren portales que tienen que ver con Ro. Pero son preguntas que no se pueden contestar, porque es un segundo, no una enfermedad o algo que se pueda manejar”.

“El no entender es algo que te vuelve loco. Querés entender de qué va la vida y de qué va la muerte. Yo creo que no hay un final, somos el principio de algo gigantesco que ni siquiera lo sabemos. Y creo que en muchos momentos de la noche y nuestros sueños, estamos en otro plano”, reflexionó.

“No puedo explicar el dolor, no puedo explicar la pérdida”, apenas pudo decir, y luego mostró su primer y último tatuaje que se hizo estando en Miami.

El mismo es un “2” y un “8” que juntos forman el signo infinito, representando no solo la fecha 28, día en que tanto Romina como Mila fallecieron, sino que son “dos” infinitos.

“Muchas casualidades y muchas causalidades. Una historia familiar de mujeres muy compleja, que han sufrido tanto. Vengo estudiando y descubrí que eran mujeres sumamente brillantes”, agregó Cris.