Este jueves, mediante videoconferencia se llevó adelante la audiencia imputativa contra Carlos Daniel B., acusado como autor del brutal femicidio de Lorena Riquel, el pasado sábado a la madrugada en Rueda al 5500. Familiares del hombre, que quedó preso, se manifestaron en el Centro de Justicia Penal ya que juran que el detenido es inocente y se trata de un error.

A Carlos Daniel B. le adjudican los delitos de femicidio, abuso sexual con acceso carnal y hurto calamitoso, tres hechos en concurso real, todos en carácter de autor.

El juez de primera instancia Nicolás Vico Gimena le dictó la prisión preventiva efectiva por el plazo de ley, haciendo lugar al pedido de Fiscalía, la que a través de la fiscal de Homicidios Dolosos Georgina Pairola le imputó el asesinato de la mujer de 39 años.

De acuerdo a la investigación, el hombre, de 32 años, interceptó a la víctima “mientras ésta se encontraba junto a sus compañeras y valiéndose de la confianza de dicha mujer, con quien se conocían previamente, la apartó de su grupo, dirigiéndose ambos a calle Rueda al 5500 de Rosario”.

Allí, según la Fiscalía, hubo una discusión en la que el imputado “le exigía la entrega de dinero” y luego “abusó sexualmente de ella, empleando su fuerza, para posteriormente propinarle reiterados golpes con bloques de cemento que halló en el lugar, lo que le ocasionó politraumatismos que le provocaron su fallecimiento”.

De acuerdo a los indicios que tiene la fiscal Pairola, el femicida, “aprovechándose de la situación de Lorena Riquel, se apodera de sus zapatillas para finalmente retirarse del lugar por calle Rueda hacia calle Teniente Agneta”.

El lunes por la tarde, en calle Lima al 2700, personal de la Brigada de Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal detuvo al acusado en la vía pública.

Desde Fiscalía anunciaron que este viernes por la mañana, la fiscal ampliará ante la prensa más detalles de la imputación y de la causa que investiga el resonante femicidio.

“Que busquen la culpable porque está afuera”

 

En tanto, familiares y allegados de Carlos Daniel B. se manifestaron afuera del Centro de Justicia Penal mientras se desarrollaba la audiencia para expresar que los investigadores del caso “están equivocados” y que el detenido “no tiene nada que ver”.

“Lo llevaron por una lágrima, están equivocados”, dijo su mujer, en relación a un tatuaje que el acusado tiene en el rostro y en base al cual lo buscaron. “Él estuvo todo el viernes conmigo en barrio Godoy”, agregó ante las cámaras de El Tres.

“Lamento lo que le pasó a la chica pero que busquen al culpable porque está afuera”, completó la mujer junto a otras que sostenían carteles con el pedido “Encuentren al verdadero asesino”.

Otra joven que se manifestaba en el lugar aseguró también que “es una coincidencia” porque “en el barrio hay millones de chicos con la misma lágrima (tatuada en la cara), no hay ninguna prueba”.

“Quieren enganchar a cualquier perejil y dejarlo preso, sólo porque él alguna vez estuvo preso por alguna causa”, concluyó.