La investigación del crimen del dirigente del gremio Uatre que fue asesinado el 18 de noviembre en Colón, Mauricio Cordara, dio un paso más este viernes con la acusación a dos hombres involucrados con la entrega del Fiat Palio rojo a los sicarios que se dirigieron a esa localidad bonaerense desde Rosario.

Puntualmente, el recluso Ángel Ochoa –alojado en la cárcel de Piñero– y Fernando Burgos –detenido esta semana– fueron acusados por el fiscal Matías Edery de haber recibido y adquirido el vehículo previo a que sea entregado a otras personas el 17 de noviembre. Por ello, fueron acusados de encubrimiento.

El caso ya tenía imputado a dos hombres, también por encubrimiento. Uno de ellos es Ramón “Monchi” Vallejos (59), veterano hampón y padre del referente criminal de Nuevo Alberdi Hernán “Lichi” Romero. Y a Blas Ángel Jonatan “Negro” Sosa (30), el hombre que mantuvo escondido en auto en una cochera de alquiler en México al 900 bis, zona noroeste, previo a la entrega.

De acuerdo con la acusación, Burgos contactó al recluso Ángel Ochoa, que purga una condena desde 2018 por robo calificado, y le consultó por un auto a la venta. Esto ocurrió el 15 de noviembre.

Burgos dijo: “Amigo, necesitan un auto de los de Miami para hacer un laburo y lo descartan”.

Ochoa le respondió: “Sí, tengo el Palio rojo en un garage en Nicaragua y México”.

Así, tras arreglar un precio por la suma de 650 mil, Burgos con la colaboración de Blas “Negro” Sosa le colocaron al vehículo una chapa patente robada el 30 de agosto en la localidad de Monte Grande.

El 17 de noviembre el Palio fue entregado a los partícipes y/o autores del hecho del homicidio agravado de Mauricio Cordara. Según la evidencia, fue en la zona oeste, en barrio Triángulo.

Parte de esta evidencia surgió con el secuestro de un celular de Ochoa el 4 de diciembre, en su celda del pabellón 20 de la cárcel de Piñero, en una medida encabezada por personal de área de Inteligencia de la Agencia de Investigación Criminal (AIC).

Entre el cuerpo de evidencia también constan mensajes entre Ochoa y su novia Marilín, que fue allanada en su casa de Pasaje 13107 en barrio Nuevo Alberdi. Del lugar, los detectives de AIC secuestraron casi tres millones de pesos. Burgos fue detenido en su casa de Tarragona al 1800 bis, en barrio Hostal del Sol.

Monchi Vallejos fue detenido el 28 de noviembre en la estación de servicios de Baigorria y colectora de Circunvalación a bordo del Palio. Fue cuatro días después de que la justicia bonaerense pidiera la colaboración del MPA en la causa..

El “Negro Blas”, en tanto, recibió el Palio y lo llevó a la cochera que alquiló en calle México 900 bis entre el 10 y 14 de noviembre de 2022, dijeron los fiscales.

También se los acusó ambos de haber recibido y/o adquirido la chapa patente –que correspondía también a un Palio– sustraída el 30 de agosto de 2022 en la localidad bonaerense de Monte Grande, que colocada al auto que usaron los homicidas.

Justicia bonaerense

Blas Sosa, Ochoa y Burgos fueron acusados este viernes en el ámbito de la Justicia bonaerense. La fiscal a cargo de investigar el crimen de Cordara les achacó participación secundaria en el crimen. Según la funcionaria, tenían conocimiento de que el coche se iba a utilizar en un homicidio.

En tanto, uno de los sicarios está identificado pero prófugo.

El jefe de Cordara era Pablo Ansaloni, ex diputado nacional y vicepresidente de la Obra Social Osprera.

Ansaloni fue candidato a secretario general del gremio en las elecciones pasadas del 21 de diciembre que perdió a manos del oficialismo, representado por José Voytenco.

Voytenco fue el gremialista que sucedió a Ramón Ayala, que murió en octubre de 2020 por coronavirus. Este dirigente, a su vez, había reemplazado al patriarca del sindicato, el necochense Gerónimo “Momo” Venegas.

Se especula que el ataque estaba dirigido para el propio Ansaloni, quien no se encontraba en el momento del hecho. Lo que está claro es que los homicidas se trasladaron desde Rosario hasta Colón para llevar a cabo el asesinato.