El fiscal Luis Schiappa Pietra, uno de los investigadores a cargo de la pesquisa del crimen de Lorenzo "Jimi" Altamirano, criticó al ministro de Seguridad de Santa Fe, Rubén Rimoldi, y desmintió sus declaraciones sobre que personal policial había solicitado allanamientos para detener a personas en el marco de esa causa. Además de negar esa información, el integrante del Ministerio Público de la Acusación (MPA) dijo que esas son “manifestaciones absolutamente innecesarias”.

“Es una investigación muy compleja; hay que manejarla con mucho cuidado y sigilo. Y la información que se brinda públicamente a veces no es la correcta y eso puede afectar a las investigaciones”, sostuvo Schiappa Pietra, a cargo de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos, en diálogo con La primera de la tarde (Radio 2).

Schiappa Pietra salió a desmentir estas manifestaciones y se mostró asombrado por las palabras de Rimoldi: “Cómo un ministro va a salir a decir que nosotros estamos por allanar un domicilio. Es inaudito que alguien diga que estamos por allanar”.

Rimoldi dijo en el mediodía de este miércoles que en una comunicación con personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) le aseguraron que “la investigación estaba muy avanzaba” y que los detectives habían solicitado allanamientos para detener personas, medidas que –de acuerdo con el ministro– los fiscales debían efectivizar.

Schiappa Pietra se lamentó: “Es difícil avanzar en las investigaciones con estos contratiempos” que a su vez generan expectativas en la población y en la familia de la víctima. “No hay razón para que se ventilen estas cosas”.

El fiscal, que trabaja junto con su par Matías Edery, aseguró: “Estamos en los primeros momentos de una causa compleja, con una serie de ramificaciones y distintos hechos vinculados”.

En relación con el homicidio de Altamirano, que fue asesinado de tres balazos a metros del estadio de Newell's luego de ser secuestrado al azar luego de salir de un ensayo con su banda de punk rock. El rapto habría ocurrido sobre 27 de Febrero entre Ovidio Lagos y Francia, minutos después de las 22.30. A las 22.48 fue muerto de tres balazos. Los homicidas dejaron entre la ropa un mensaje para los capos de la barrabrava leprosa, tres miembros de la banda de Los Monos.

El crimen se investiga como parte de una saga que incluyó una serie de atentados y mensajes mafiosos entre dos facciones narco que comenzó al menos desde noviembre pasado.

Rimoldi ya había realizado polémicas declaraciones en la mañana del martes, al expresar al término de una exposición en la Legislatura santafesina que en la causa de Altamirano había habido allanamientos y detenciones, presuntos avances que fueron desmentidos.