La investigación tributaria que lleva adelante la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) por las 950 cuentas con más de un millón de dólares no declaradas en el exterior ahora sumó un capítulo penal.

El fiscal federal Federico Delgado presentó este viernes su investigación a partir de una denuncia del economista, tributarista y excoordinador del equipo especialista en fuga de capitales del Centro de Economía y Finanzas para el Desarrollo Argentino (Cefid-AR), Jorge Gaggero, para que se investigue a la línea jerárquica de la Afip al momento de recibir la información de la Ocde que contenía estas cuentas.

El fiscal habría podido comprobar de manera preliminar que durante las gestiones de Alberto Abad y Leonardo Cuccioli la línea ejecutiva de la Afip decidió no abrir los “paquetes” de información que tenían estas cuentas no declaradas. Abad y Cuccioli fueron los encargados de dirigir al organismo fiscal durante el gobierno de Mauricio Macri. Ahora quedará en manos del juez determinar las consecuencias penales de esos actos, el por qué no se investigó la información que llegó a finales de 2017 y que recién se empezó a estudiar en diciembre de 2019 y qué sucedió con la cadena de custodia.

De los 950 beneficiarios finales, 700 no admitieron poseer activo alguno en el extranjero. Es decir, no presentaron liquidación de Bienes Personales como si no llegaran al mínimo para su pago.

La noticia es seguida de cerca por el equipo de Mercedes Marcó del Pont que en paralelo en que se lleva adelante un sumario interno señalan que hay “preocupación” y “disgusto” por el manejo de los datos que se hizo.

La noticia de la denuncia de Delgado se conoció el mismo día en que comenzaron a llegar las notificaciones a los 950 titulares de cuentas no declaradas por más de USD 1 millón para que realicen sus descargos.

Las cuentas están radicadas en su gran mayoría en Uruguay y son de un grupo de contribuyentes que le ocultó al fisco más de USD 2.600 millones. De los 950 beneficiarios finales, 700 no admitieron poseer activo alguno en el extranjero. Es decir, no presentaron liquidación de Bienes Personales como si no llegaran al mínimo para su pago.

Esta información es de 2017 y llegó a manos de las autoridades argentinas en 2018 consecuencia a los acuerdos internacionales de los que forma parte la Argentina para el intercambio de información financiara. Los “paquetes” encriptados como le llaman en la jerga tributaria fueron entregada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde).

Con respecto a los perfiles de estos evasores, los dividieron en tres grupos. El primero es aquel que hizo su declaración de Bienes Personales y manifestó tener una cuenta en el exterior, pero con montos muy inferiores a los que serían reales.

El segundo grupo también declaró Bienes Personales, pero omitió los bienes en el exterior; y un tercer grupo que directamente no presentó declaraciones de Bienes Personales. “En este último grupo encontramos cuentas de hasta USD 20 millones que no habían declarado absolutamente nada”, aseguraron en la Afip.

La posibilidad de que el número de cuentas sin declarar y el monto en dólares en el exterior se incremente está latente ya que, según explicaron, esto se alcanzó con un porcentaje de toda la información brindada en 2017 por la Ocde, organismo que está conformado también por países que suelen ser sindicados como paraísos fiscales, como por ejemplo Luxemburgo y Suiza, y que forma parte de un acuerdo del que participan más de 100 países con intercambio de información para evitar este tipo de evasiones.

Así es que en los próximos días, Afip avanzará en la apertura de más de esos paquetes encriptados que envió la Ocde por lo que la expectativa es que aparezcan nuevas cuentas escondidas en diferentes paraísos fiscales.