En las últimas horas, el VAR volvió a ser objeto de críticas y los árbitros que lo manejan protagonistas de su mala utilización. Tras el gol anulado a Boca, que derivó en el empate 0 a 0 ante Atlético Mineiro, y el escándalo en el partido de Cerro Porteño y Fluminense, se desató la polémica, ambos por Copa Libertadores.

Por un lado, la Conmebol anunció este miércoles que tanto el árbitro principal de Boca-Mineiro, Andrés Rojas, como el encargado del VAR, Derlis López, fueron suspendidos.

En un breve comunicado se detalla que incurrieron en "errores graves en el ejercicio de sus funciones" en el minuto 34 a invalidar el gol del Pulpo Gónzalez, por la ida de octavos de final.

Por otra parte, en Paraguay están que arden por un par de acciones que perjudicaron a Cerro Porteño contra Fluminense, en un partido que terminó 2 a 0 para los brasileños.

Mucho mayor fue el enojo cuando escucharon los audios del VAR, en el que no observan a un jugador de Fluminense habilitando a todos los delanteros de Cerro Porteño después de innumerables repeticiones.

Esa jugada terminó en gol de Cerro cuando el partido todavía estaba 0 a 0. Y luego, pidieron un penal por mano que el VAR daba por hecho y que el árbitro argentino Facundo Tello desestimó.

Por ello, Cerro Porteño también pide la suspensión de los árbitros de campo y los del VAR, a la vez que reclamó que el partido se vuelva a jugar.