La selección de fútbol de Brasil presentó este martes una camiseta que usará en la Copa América, que comenzará en junio próximo en ese país, con un color muy particular: el blanco, extraño para una institución tan ligada al amarillo.

Pero no es sólo un capricho de la marca que viste a la pentacampeona del mundo, ya que se trata de un homenaje a la casaca original de Brasil, adoptada en 1914 y que usó en los mundiales de 1930, 1934, 1938 y 1950.

Tras la derrota en la final del Mundial disputado en Brasil en 1950 ante Uruguay, conocida como “Maracanazo”, ese color pasó a ser considerado de mala suerte y fue sustituido en 1954, en el Mundial de Suiza, por el actual amarillo. Ahora se recupera el blanco tras 65 años de olvido, con detalles azules en mangas y cuello.

"Se trata de la camisa blanca que la selección vistió cuando venció la Copa América de 1919, hace 100 años. Una camisa que conmemora un título de 100 años vestida por un jugador de 18 años", afirmó Rogério Caboclo, quien en la misma ceremonia tomó posesión como nuevo presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF).

El dirigente llamó de esa manera al palco al delantero Vinicius Júnior, una de las revelaciones del fútbol brasileño y jugador del Real Madrid, que fue el encargado de presentar la nueva vestimenta.

De todos modos, la flamante pilcha es la tercera alternativa y sólo sería usada en el debut de Brasil en la Copa, ante Bolivia. Para el resto de los partidos, el seleccionado local alternaría entre la tradicional verdeamerela –amarilla con vivos verdes– y la de color azul.