BYD proyecta desembarcar en Rosario en 2026: "Queremos liderar la revolución eléctrica del país"

El gigante chino de la electromovilidad analiza expandirse hacia el interior productivo argentino y ya mira a Rosario como punto estratégico. En diálogo con Ecos365, su responsable global de marketing adelantó los planes de inversión, innovación y liderazgo que marcarán el próximo salto

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El gigante chino BYD, líder mundial en vehículos eléctricos e híbridos, planea un desembarco con todo en Argentina y que incluye a Rosario dentro los próximos pasos para 2026. Así lo anticipó José Miranda, responsable global de marketing de la marca en cuatro continentes, en diálogo con Ecos365 durante el lanzamiento oficial en Costa Salguero, Buenos Aires.

“Nuestro sueño es hacer mucho más en Argentina. Y ojalá pronto también en Rosario. Es un país con historia automotriz y con un público apasionado por los autos. Este país tiene un potencial enorme”, aseguró Miranda, con la serenidad de quien representa a una de las automotrices más innovadoras del planeta. Varios grupos empresariales se disputan la marca para Rosario y la provincia de Santa Fe.

Una compañía que no espera: impulsa

BYD, que emplea más de un millón de personas y cuenta con 120.000 ingenieros en su área de I+D, no depende de terceros: fabrica desde las baterías hasta los chips, semiconductores y paneles solares que integran cada modelo.

“El 90% de un auto BYD es BYD”, destacó Miranda. “Por eso decimos que esto no es un auto, es un BYD. Es una experiencia tecnológica, no sólo un vehículo”.

Con 45 nuevas patentes diarias, la empresa se posiciona como la automotriz que más invierte en innovación en el mundo. En palabras del ejecutivo, “somos el Apple del automóvil: diseño, tecnología y usabilidad pensados como un ecosistema”.

Argentina, un nuevo desafío

El desembarco en Argentina, explicó Miranda, tiene una lógica estratégica: expandir la electromovilidad en Sudamérica desde una red regional que ya incluye a Brasil, México, Chile y Uruguay. “Este país tiene un componente emocional con el auto, una cultura tuerca muy fuerte. Queremos aprovechar eso para transformar esa pasión en una nueva forma de movilidad”, sostuvo.

El ejecutivo aseguró que el entusiasmo local superó las expectativas:

“Tenemos más de 1.500 clientes con su BYD reservado antes de anunciar los precios. Es una locura. Nunca nos había pasado.”

El plan incluye una red de showrooms con diseño de Apple Store, experiencias digitales, y un sistema de postventa y repuestos pensado para consolidar presencia en el interior del país.

Rosario y Santa Fe, nodos del cambio

Dentro del plan de expansión, Rosario y Santa Fe aparecen como zonas clave para la próxima etapa de crecimiento. “La electromovilidad tiene que llegar al interior productivo, a las provincias que empujan la economía. Rosario combina innovación, logística y cultura automotriz. Es el lugar natural para que BYD se afiance”, confió Miranda.

La automotriz proyecta iniciar allí su segunda etapa de instalación, que incluiría una base operativa y un centro de servicio integral. El horizonte de 2026 es el que hoy suena más probable.

Más que autos: salud pública e inversión

Miranda explicó que el impacto de la electromovilidad va mucho más allá del transporte: “En Santiago de Chile, donde ya circulan más de 2.000 buses eléctricos, cambió el aire. Literalmente. La gente respira mejor. Esto tiene un beneficio social y sanitario enorme.”

La experiencia regional es el argumento con el que BYD planea impulsar el cambio sin esperar que haya infraestructura de carga perfecta. “Los usuarios cargan su auto en casa, como cargan el celular. Con 380 km de autonomía, nadie necesita enchufarlo todos los días”, agregó.

Producción local y visión 2026

La posibilidad de fabricar autos en Argentina no es una idea lejana. Miranda confirmó que la empresa analiza condiciones de estabilidad y proyección antes de definir una inversión. “Hace tres años nadie creía que abriríamos una planta en Brasil, y hoy está operativa. Todo depende del contexto, pero no descartamos hacerlo acá. Queremos que Argentina sea parte de nuestra red productiva.”

El desembarco, por ahora, se da a través de una filial directa y no de un importador, lo que muestra la apuesta a largo plazo de la compañía. “Cuando una marca instala su propia estructura, es porque ve futuro”, sintetizó el ejecutivo.

Optimismo y señales de inversión

Pese a los vaivenes económicos del país, Miranda transmitió una visión optimista: “Hacía mucho que no llegaba una marca grande a invertir en Argentina. Hay una sensación positiva de que el país puede volver a atraer grandes jugadores. Lo que estamos haciendo es una señal de confianza.”

La compañía trabaja junto a redes de concesionarios seleccionados, con el objetivo de duplicar los puntos de venta en 2025 y consolidar su presencia nacional.

El futuro ya arrancó

Para Miranda, el desafío no es tecnológico sino cultural. “Cuando una persona maneja un auto eléctrico, no vuelve atrás. Es silencio, torque instantáneo, comodidad total. El cambio es irreversible.”

En Rosario, ese futuro ya tiene fecha tentativa. Si los planes avanzan como espera BYD, 2026 será el año en que la ciudad sume una nueva fábrica o base operativa de la automotriz china.

Y si algo quedó claro en la entrevista, es que no se trata de una moda pasajera: “La electromovilidad llegó para quedarse y cambiarlo todo.”

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