La Argentina, a través del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), se autodeclaró este martes como país libre de influenza aviar altamente patógena (IAAP) ante la Organización Mundial de Sanidad Animal (Omsa), tras haber cerrado el último brote en aves comerciales, a 179 días del inicio de la emergencia sanitaria.
Fue a través de un documento elevado ante el organismo multilateral, "que respalda y sustenta la actual condición de Argentina como país libre de la enfermedad", señaló el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca Juan José Bahillo ante la culminación de las acciones sanitarias en el último brote de IAAP en aves de corral (circuito comercial).
"Luego de transcurridos más de 28 días desde la finalización de las tareas de despoblamiento, que incluye la disposición final y la limpieza y desinfección de las granjas afectadas, se logró el cierre del último de los 18 brotes de IAAP en establecimientos comerciales registrados en el territorio nacional", explicó el Senasa en un comunicado.
Asimismo, la dependencia oficial resaltó que "desde junio de este año no se han detectado nuevos brotes en aves de corral, conforme a la vigilancia epidemiológica aplicada".
La Dirección Nacional de Sanidad Animal (DNSA) del Senasa tiene registradas (desde el inicio de la epidemia) 558 notificaciones en total, de las cuales 469 fueron atendidas y 89 descartadas: 280 correspondieron a casos de traspatio, 104 a corral, y 85 a silvestres.
Los casos confirmados fueron en aves de traspatio (79), sector comercial (18) y silvestres (siete), distribuidos de la siguiente manera: 24 en provincia de Buenos Aires; 22 en Córdoba; 12 en Neuquén; nueve en Santa Fe; siete en Río Negro y Chubut; cuatro en Chaco; tres en Formosa; dos en Entre Ríos, San Luis, La Pampa, Corrientes, Salta, Santa Cruz y Santiago del Estero; y uno en Jujuy y Mendoza.
El documento elaborado por la DNSA describe las medidas adoptadas desde la confirmación del primer brote en febrero último en un ganso andino silvestre en la Laguna de los Pozuelos, al norte de Jujuy; las acciones de sacrificio y desinfección; y la vigilancia epidemiológica realizada, que sustentan el estatus de país libre según el Artículo 10.4.6 del Código Sanitario de los Animales Terrestres de la Omsa.
"Actuamos eficientemente para controlar la enfermedad y dar las garantías de vigilancia epidemiológica, que sustenta que la enfermedad no se encuentra presente en la avicultura nacional. Seguimos trabajando en las herramientas de zonificación, con el objetivo de mantener el comercio internacional sin interrupciones ante un eventual rebrote en aves de corral", señaló la directora nacional de Sanidad Animal del Senasa, Ximena Melón.
Por último, la funcionaria enfatizó: "El trabajo llevado a cabo por la DNSA, sus áreas operativas en las regiones, el laboratorio nacional del Senasa, junto a la articulación con el sector productivo y las instituciones provinciales y nacionales, permitió recuperar la estabilidad epidemiológica luego de transcurridos casi seis meses desde la primera detección en predios de la avicultura".
El Ministerio de Economía, a través de la Secretaría de Agricultura, dispuso una partida de 7.450 millones de pesos para asistir a los productores avícolas de todo el país afectados por la situación.
Fue a través de la creación del Programa de Asistencia Económica por la Emergencia Sanitaria - Influenza Aviar H5 y H7, oficializado mediante la Resolución 683/2023 publicada el pasado 17 de mayo en el Boletín Oficial, cuyos fondos provienen del Fondo de Incremento Exportador, conformado por una parte de las liquidaciones de divisas de las agroexportaciones.



