El humo de las islas entrerrianas tortura a Rosario. Es un problema recurrente que obligó al gobierno nacional a declarar la emergencia ambiental y zona crítica de protección ambiental al delta del río Paraná. La dueña de uno de los campos donde suelen detectarse las llamas defendió que la zona se mantenga como área productiva.

Claudia Maceratesi es presidenta comunal de Camilo Aldao e hija de José Luis Maceratesi quien junto a su hermano Juan, hace unos 50 años que se dedican a la ganadería en la isla 6, cerca de Puerto Gaboto. En contacto con el programa A diario (Radio 2), Maceratesi aseguró que nunca, en todos estos años, su familia recurrió a la estrategia de la quema de pastizales para recuperar terreno.

Sin embargo, hace tres años fueron acusados de generar incendios, lo que refutaron con evidencias. Y ahora de nuevo, son señalados por lo mismo, pero las llamas se iniciaron en la isla 3 hace tres semanas, hecho que fue denunciado oportunamente en la comisaría. 

“El viento –explicó Maceratesi– arrastró las llamas” hasta su campo.

“De mi parte, de mis padres y tíos puedo decir que jamás se prendió fuego –aseguró–. Nosotros jamás hicimos una quema como para tener el pasto como la gente. Son alrededor de 2 mil hectáreas y el pasto viene solo, no se necesita quemar para que venga el pasto”.

Consultada sobre la posibilidad de que en la zona se prohíban algunas actividades económicas para proteger los humedales, Maceratesi lo consideró "injusto" y reclamó mayor control sobre quienes sí prenden fuego deliberadamente.