El regreso a la presencialidad escolar trajo aparejada la discusión en relación al estado edilicio de las escuelas que tanto del gremio docente como de la oposición cuestionan y señalan como deficitaria. El delegado de la Regional VI de Educación, Osvaldo Biaggiotti, salió al cruce de estas posturas a través de un posteo en su cuenta de Facebook, en el que apunta directamente a la gestión socialista y defiende las políticas públicas desarrolladas por el gobierno de Omar Perotti en materia de mantenimiento de los edificios escolares santafesinos.

Bajo el título “Algunas aclaraciones sobre el estado de las escuelas en Santa Fe”, el funcionario regional encabeza su texto que acompaña con un gráfico. “No dejo de sorprenderme ante posteos de santafesinos del ámbito de la Educación, identificados con la anterior gestión provincial, que hablan de "ajuste", de "desinversión", señalan los déficits de infraestructura escolar, se indignan porque las escuelas no están en condiciones, etc.

Y me surgen algunas preguntas. ¿Los problemas edilicios empezaron acaso en diciembre de 2019? ¿En qué condiciones de infraestructura dejó el sistema escolar el gobernador Lifschitz? ¿Qué tanto se hizo en la "pre-pandemia", y qué tanto se postergó indefinidamente?

Por ejemplo, ¿saben cuál fue la inversión  en infraestructura y equipamiento escolar entre 2016 y 2019? Vean el gráfico (fuentes oficiales). Si hablamos de estados provinciales grandes, Santa Fe sólo se ve "superada" en desinversión por la Buenos Aires de Mariu Vidal. Aclaración: en el gráfico no se considera el 2019, que fue peor aún, ya que pusieron punto muerto (por no decir que apagaron el motor) el lunes siguiente a las elecciones”, escribió.

Luego, se dedica a respaldar la gestión provincial que encabeza en la región que comprende a la ciudad de Rosario. “Hoy por hoy, y desde inicios del año pasado, estamos haciendo los máximos esfuerzos para atender necesidades de infraestructura escolar de todo tipo, las cuales se han ido originando -y agravando- durante al menos una década. Y en un contexto de pandemia inédito que impuso tremendas restricciones, simultáneamente habiendo tenido que, por ejemplo, cuadruplicar la asistencia alimentaria escolar, o debiendo afrontar un incremento sin precedentes de robo y vandalismo contra escuelas.

Las demandas se han ido acumulando año tras año, como una gruesa capa de sedimento que se asienta en el lecho de un río. Las aguas turbulentas de la pandemia han levantado ese sedimento. Y entonces más de uno -intencionado o desprevenido- se hace eco de la falacia de responsabilizar a esta gestión.

Semana a semana, al entregar FANIs (asignaciones presupuestarias a escuelas para obras estructurales), una que otra directora nos agradece con lágrimas en los ojos: "Ministra, Delegado, hace ..... años que esperábamos esto" (sobre la línea de puntos, completar con 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8...)”.

Por último, expresó: “Sé que a muchos les fastidia que se hable de "pesada herencia". Pero las cosas son como son. La mentira y la posverdad se alimentan de la a-historicidad”.