Desde este miércoles volvió la presencialidad al jardín de infantes “Amiguitos”, de Funes, a pesar del decreto del gobernador Omar Perotti que suspendió esta modalidad por esta semana. El intendente Roly Santacroce así lo decidió al confirmar que el establecimiento no depende del gobierno provincial. En Rosario, solo están habilitados para la presencialidad los jardines maternales.

“Estoy convencido que los niños tienen que estar en el aula”, dijo el intendente funense en contacto con el programa Radiópolis (Radio 2). Y aclaró que el 80 por ciento de los niños que acuden al jardín son hijos de empleados municipales y que la mayoría también va caminando, con lo cual se cumple con la disminución de la circulación.

Al pertenecer al departamento Rosario, la vecina localidad está clasificada como de “alarma epidemiológica” por Nación. Esta etiqueta obligó a Perotti a endurecer las restricciones, pero al mismo tiempo a reclamar a la administración central por un cambio de clasificación porque no se tuvieron en cuenta algunas variables.