La policía santafesina descubrió este sábado por la mañana un boquete de 35 centímetros de profundidad y 30 de ancho en una celda, por donde intentaban fugarse once internos. Sucedió mientras realizaba una requisa de rutina en la alcaidía de la jefatura de policía, informaron fuentes de esa fuerza.
El túnel fue descubierto en el subsuelo del edificio de Primera Junta y 9 de Julio, en una de las paredes del pabellón 6, donde se alojaban 11 internos. Según las fuentes, los autores del boquete lograron perforar gran parte de la pared, pero todavía les faltaban diez centímetros de ladrillo por remover, puesto que esos muros tienen un ancho de alrededor de 45 centímetros.
La abertura detectada estaba sobre un dintel, en una zona de la pared atravesada por caños de agua, lo que facilitó el trabajo a los detenidos porque el agua había humedecido la pared, que pudo ser descascarada con cierta facilidad por los reclusos, explicaron las fuentes.
Tras tomar conocimiento del hecho, las autoridades informaron que los internos fueron redistribuidos en otras celdas y que se inció un sumario interno.
Fuente: Télam
