A casi cinco meses de la desaparición de Walter Serra, su hermana Paula reclamó por la profundización de la búsqueda. Tras destacar que no hay “ninguna novedad” sobre el paradero, señaló que están “enojados con la jueza, el fiscal y la Policía, porque no lo están buscando como deben”.

En diálogo con Sergio Roulier en La primera de la tarde (Radio 2), Paula indicó que “la búsqueda es ineficiente, y la gente que lo busca es ineficiente, todo da negativo. Los rastrillajes se hicieron 15 días tarde, creo que eso fue algo crucial”.

La hermana del desaparecido contó que le “advirtieron” que “deje de ensuciar a la policía y al juez porque iba a tener una visita desagradable, que iba a ser «la segunda»”.

Y amplió: “Más que una amenaza fue una advertencia, hecha en diciembre, después de Navidad”. Si bien prefirió no revelar quién se lo dijo, indicó que fue “una mujer vinculada a la investigación”.

Walter no aparece desde el 24 de octubre

“Siempre sostuve que a mi hermano se lo llevaron”, dijo. “No entiendo por qué, no es un empresario, trabajaba en un bar por monedas”, agregó.

Como ya lo había hecho con anteriorioridad, Laura Serra ratificó que Walter “le llevaba la cuenta a una persona que manejaba cereal en negro, a eso siempre lo dijimos. También que vendía dólares en negro pero a un círculo muy cerrado, a la familia y amigos”.

Consultada sobre una posible desaparición por propia voluntad, versión que habría surgido del propio círculo familiar, señaló que “no entiendo por qué se tendría que haber ido. No era estafador ni tenía vínculos con la droga”.

“No creo que mi cuñada no nos diga si sabe algo, la conozco, se mostró desesperada. Con la hija también es una situación tremenda”, concluyó.