En el estreno de su condición de equipo recién ascendido, Rosario Central vivió una fiesta completa. Además de la gran celebración que desató antes y después del partido, el equipo de Russo logró una cómoda victoria por 2 a 0 sobre Aldosivi de Mar del Plata con tantos de Valentini y Bareiro, llegó a los 71 puntos y podrá consagrarse campeón si el domingo vence a Gimnasia en La Plata.

Después de una previa que hizo delirar al estadio y a cada alma que gritó por la vuelta a la máxima categoría, los canallas y el Tiburón salieron con el objetivo de continuar con la cosecha de puntos. Uno, para concluir una campaña inolvidable en lo más alto; el otro, para engrosar su promedio, que mucho margen no le deja para la próxima temporada.

Y la noche de gala empezó a ser completa temprano, en el inicio del juego. Con apenas siete minutos, Valentini conectó de cabeza un córner que envió Delgado y la clavó en un ángulo. Fue su segunda conquista en la B Nacional y la que abrió el partido ante el conjunto marplatense. Sin dudas, un guiño del destino para el defensor: marcó ante su gente y fue largamente ovacionado.

El resto de esa primera etapa transcurrió sin sobresaltos para los de Russo, que jugaron con la tranquilidad del resultado y con suma comodidad ante un rival que prácticamente no tuvo la pelota. 

El complemento tuvo un despertar similar al inicio del cotejo: de entrada, el Canalla marcó. Toledo desbordó por la izquierda y le cedió el gol a Bareiro, que entró por el medio del área y venció a Campodónico. Al reconocimiento, claro, se lo llevó el nueve.

Después, todo volvió a transcurrir con mayor interés sobre lo que pasaba afuera de la cancha que adentro.  Inclusive, el encuentro estuvo detenido por algo más de ocho minutos porque Rapallini interpretó que no se podía jugar con las belgalas que surgían desde el seno de la barra. ¿Una respuesta? La reprobación del resto del estadio hacia ese sector de la hinchada.

Sin mayores emociones en el desarrollo, el foco empezó a estar en el Monumento, lugar elegido para seguir la noche de gala. Entonces, cuando el éxito finalmente se consumó, el Canalla llegó a los 71 puntos y le sacó cinco a Gimnasia de La Plata (66), conjunto que consiguió el segundo ascenso y será justamente su próximo rival. Por eso, si el domingo gana en la Ciudad de las Diagonales, podrá pegar el grito de campeón.