Kate Moss lleva el arte en el cuerpo, mejor dicho, en la cintura. La modelo tiene tatuados dos golondrinas en la zona lumbar realizadas por Lucian Freud. El artista, además de ser uno de los pintores figurativos más reconocidos, ostenta el título de nieto de Sigmund. Su obra más cara, “Mujer en el sofá”, alcanzó los 33 millones de dólares.

La idea de tatuarse los pajaritos justo ahí, donde empieza la otra mitad del cuerpo, surgió cuando la modelo estaba embarazada de su hija Lila Grace. Freud le dijo que había estado en la marina y que, por eso conocía la técnica de pintar el cuerpo.

Durante un tiempo Moss fue la musa del desaparecido artista y aceptó posar desnuda para él. Como muestra de gratitud, Freud accedió a grabarle las dos golondrinas.

La relación entre los dos se inició 2002. La ex chica Calvin Klein dijo, por entonces, que el pintor era la persona a la que más le gustaría conocer. A partir de allí, la hija del pintor hizo el nexo.