A poco de que comiencen a desatarse en la ciudad los festejos por el Día del Amigo, previstos en realidad para todo el fin de semana, los taxistas salieron una vez más a prometer que la alta demanda esperada se verá satisfecha, más allá de algún “colapso” lógico en horas pico.
El secretario general del Sindicato de Peones de Taxis local, Horacio Boix, analizó en Radio 2 que “todos van a querer trabajar por la mayor demanda de servicios” que se avizora entre jueves y domingo próximos.
En consonancia, su colega de la Asociación de Conductores de Taxis, Francisco Báez, consideró una “ventaja” el hecho de que este año la celebración no se focalizará sólo el 20 de julio sino que la gente “se va a repartir” entre dos o tres días diferentes.
“No va a ser como otros años, yo soy optimista”, dijo en el programa La primera de la tarde. Pero aclaró: “Si sale media ciudad (toda junta), por momentos vamos a estar colapsados”.
Ambos dirigentes también coincidieron en reclamo de garantías para poder trabajar seguros por las noches que se avecinan. “Que haya presencia policial y controles a los taxis”, pidió Boix, apuntando como horario critico el comprendido entre las 2.30 y las 3 de la mañana.
También solicitaron a la Municipalidad que refuerce el sistema de colectivos urbanos, a fin de favorecer la movilidad de las miles de personas que estarán en la calle.
“Duplicar frecuncias”
En ese sentido, desde el Concejo, el radical Jorge Boasso pidió este martes que se “dupliquen las frecuencias” del transporte de pasajeros desde las 20.30 hasta las 4, “para evitar congestión y accidentes”.
El edil presentó, junto a su colega María Eugenia Schmuck, un proyecto centrado en la noche del sábado, seguramente la de mayor movimiento.
“Es imprescindible brindar una alternativa necesaria para evitar el uso del automóvil particular, evitando congestiones de tránsito y posibles accidentes”, expresó Boasso.
El secretario general del Sindicato de Peones de Taxis local, Horacio Boix, analizó en Radio 2 que “todos van a querer trabajar por la mayor demanda de servicios” que se avizora entre jueves y domingo próximos.
En consonancia, su colega de la Asociación de Conductores de Taxis, Francisco Báez, consideró una “ventaja” el hecho de que este año la celebración no se focalizará sólo el 20 de julio sino que la gente “se va a repartir” entre dos o tres días diferentes.
“No va a ser como otros años, yo soy optimista”, dijo en el programa La primera de la tarde. Pero aclaró: “Si sale media ciudad (toda junta), por momentos vamos a estar colapsados”.
Ambos dirigentes también coincidieron en reclamo de garantías para poder trabajar seguros por las noches que se avecinan. “Que haya presencia policial y controles a los taxis”, pidió Boix, apuntando como horario critico el comprendido entre las 2.30 y las 3 de la mañana.
También solicitaron a la Municipalidad que refuerce el sistema de colectivos urbanos, a fin de favorecer la movilidad de las miles de personas que estarán en la calle.
“Duplicar frecuncias”
En ese sentido, desde el Concejo, el radical Jorge Boasso pidió este martes que se “dupliquen las frecuencias” del transporte de pasajeros desde las 20.30 hasta las 4, “para evitar congestión y accidentes”.
El edil presentó, junto a su colega María Eugenia Schmuck, un proyecto centrado en la noche del sábado, seguramente la de mayor movimiento.
“Es imprescindible brindar una alternativa necesaria para evitar el uso del automóvil particular, evitando congestiones de tránsito y posibles accidentes”, expresó Boasso.