9 DE AGOSTO

1981: Se juega la 33ª y anteúltima fecha del campeonato Metropolitano. Central enfrenta a Boca, que necesitaba una victoria para consagrarse campeón.

Esta circunstancia, más la presencia de Diego Maradona, hicieron que el estadio de Central estuviera colmado varias horas antes de iniciarse el partido.

El encuentro fue mediocre, y a los 10 minutos del segundo tiempo Central anotó el único gol del partido mediante un tiro libre del Chiquilín García, especialista en hacerle goles a Boca.

Cuando faltaban 15 minutos para terminar el partido, Boca dispuso de un penal a su favor, pero el remate de Maradona pegó en el travesaño del arco del tablero electrónico.

Terminado el partido, los hinchas canallas tenían una doble satisfacción: haberle ganado a Boca, e impedir que los porteños pudieran dar la vuelta olímpica en su cancha.