Si leer o no leer es el primer planteo, hacerlo con el torso cubierto o en topless plantea una vuelta de tuerca al hábito, que para no pocos es un vicio.
En Nueva York existe The Outdoor Co-Ed Topless Pulp Fiction Appreciation Society (OCETPFA , por sus siglas en inglés) un club de lectura que invita a leer en topless en espacios abiertos, tal como lo indica el nombre.
Empujados por la primavera boreal –y porque la práctica es legal en la Gran Manzana– sus miembros no dudaron en exponer sus atributos físicos en Central Park –tal como lo vienen realizando desde hace varias temporadas–, el último viernes y sábado, en la terraza de un hotel boutique.
¿Qué leen? De todo. Los tópicos abarcan todos los gustos y géneros, desde la ciencia ficción hasta los libros de historia.
OCETPFA se fundó hace unos años y la misión es "hacer de la lectura algo sexy", según cuentan en Facebook.
Al ser consultada por Alison Floyd, periodista de The Guardian, A Andrews –una de la fundadoras del club– explicó que tener los pechos al aire en modo alguno resulta un problema.
“No es más complicado leer en el parque con una mujer en topless al lado tuyo de lo que puede resultar tener a un hombre en la misma situación. Esto puede resultar tan atractivo y sexy; o no“, fue la respuesta que obtuvo la cronista del diario inglés.
“No es que leamos más en nuestros encuentros de los que podemos avanzar encerrados en una habitación silenciosa. Pero no apuntamos a eso. Nuestras reuniones son más sociales y pasamos más tiempo charlando y discutiendo libros del que gastamos con la nariz metida en las páginas, leyendo”, completó A Andrews.


