Lo que sigue es la increíble (falta de) logística del golpe millonario a un banco Municipal realizado el mes pasado. La banda que se llevó 1.800.000 pesos de la sucursal de Empalme Graneros ingresó caminando y armada, redujo a un único guardia, rompió la puerta hacia la caja fuerte con una maza y no pudo llevarse más dinero porque sólo tenía tres bolsos chicos. Después, gastaron una fortuna en una casa de electrodomésticos, compraron dos autos en efectivo y prácticamente confesaron el delito en un imperdible diálogo telefónico.

Todos los datos se desprenden del registro de las cámaras de seguridad y de escuchas telefónicas, claves en la investigación contra los tres detenidos acusados del golpe, que dio a conocer en forma exclusiva el periodista Hernán Funes este jueves en Telenoche (el Tres). 

El robo se concretó el 8 de mayo pasado en la entidad de Juan José Paso al 5700. Cinco delincuentes armados se llevaron un jugoso botín. Tres de ellos estaban disfrazados: uno como policía, otro como barrendero y uno más como empleado de un correo privado. Un cuarto tenía puesta una peluca y el restante una campera negra. Estuvieron alrededor de tres minutos.

Si bien se pensó en un golpe planeado hasta el último detalle, la investigación arrojó otra realidad. Hubo cierta inteligencia pero de una conversión del supuesto jefe de la banda, alias Mono, se desprenden varios detalles que sorprenden. En la charla registrada horas después del robo, el líder reconoce cierta improvisación.

“Ey, nos quedamos chicos con los bolsos, no entró más”, le cuenta el Mono a otro joven, ajeno al hecho. Le dice que se llevaron un millón ochocientos mil pero que había el doble. “Sí, boludo, dejamos la media caja, no entró más en los bolsos”, reconoce (ver informe).

Además de montos, en la escucha consta que fueron cinco las personas involucradas y el supuesto líder habla del “Municipal”, entre otros datos que incriminaron a los sospechosos. El grupo también dejó sus huellas al gastar 150 mil pesos en una casa de electrodomésticos y comprar dos autos en efectivo.

La banda salió de compras

La fiscal de la Unidad de Investigación y Juicio, Valeria Haurigot, y el fiscal regional, Jorge Baclini, informaron que cuatro personas fueron detenidas en la causa y hay un prófugo (el Mono). Hubo unos 20 días de lapso entre el hecho y los arrestos, fruto de la investigación y las pistas surgidas de las escuchas y el análisis de las imágenes.

De los arrestados, dos fueron imputados por el robo calificado y uso de arma, y uno por tenencia de arma de guerra. Dos permanecen en prisión preventiva por 30 días y uno con domiciliaria. El cuarto quedó libre. Los implicados judicialmente tienen entre 19 y 30 años y ya arrastraban varios antecedentes.

En los seis allanamientos realizados por la Policía de Investigaciones (PDI) en los últimos días se secuestró mucho material que vincula a los acusados con el golpe. Se trata de: una pistola marca Hi-Power calibre 9 milímetros, una réplica de pistola Glock, tres cajas de municiones calibre 9 milímetros, chalecos balísticos, prendas de vestir similares a las utilizadas por personal policial, ropa similiar a usada en el asalto, una camioneta Ford Ranger doble cabina, un Chevrolet Astra de color gris plata, comprados a particulares la semana próxima pasada en efectivo, una moto Honda Falcon negra, utilizada en el hecho, y 20 mil pesos.

Además, los ya mencionados electrodomésticos que estaban nuevos y embalados, comprados en efectivo, como: TV, dos lavarropas, termotanque, heladera, cocina y extractor, dos equipos de música (grandes).

Diálogos entre el Mono y una persona no identificada

ESCUCHA 1

- Hola

- Ey, mostro

- ¿Y, mostro?, dame una buena noticia por lo menos vos

- Sí, sí, hermano...

- ¿Cúanto? ¿cúanto?

- Ey, nos quedamos chicos con los bolsos, no entró más

- Pero cuánto, tirame el número p*to...

- Uno, ocho

- ¿Un millón ochocientos?

- Sí

- Ah, bueno, bien Mono. Pero qué, ¿no había toco de dólares, nada?

- Sí, boludo, dejamos la media caja, si no entró más en los bolsos

- Pero pará, pará, pará escuchame. Cuando abrieron la bóveda, ¿no había toco de dólares?

- No b*ludo, si es Municipal

- Ah, ¿era todo pesos?

- Sí, pero dejamos la mitad

- O sea que había cuatro millones y se trajeron dos...

- Sí, no si no entró más, No entró más. Llenamos todos los bolsos y tuvimos que salir

- Por eso, te trajiste dos millones

- Sí, si no entró más b*ludo...

- Si no se traían cuatro o cinco

ESCUCHA 2

- Si llevamos los bolsos más grandes... ¡sabés que el Gordo me dijo! viste...

- Ah... ¿el Gordo ganó?

- El Gordo me dijo, "llevá los bolsos más grandes"

- Mono, Mono, vos y el Gordo ganaron, ¿sí?

- Sí

- ¿El Tin ganó?

- ¡No! dejá de hinchar, no me quemés, b*oludo...

- Ah...

- ¿Pero este laburo era tuyo?

- Ey, b*ludo... lo miré de afuera, me mandaron a cobrar, b*ludo...

- ¿Cómo, cómo?

- Me mandaron a cobrar y fui a cobrar una tarjeta de mi hermana

- Sí

- Y lo vi y digo "no hay coso (sic)", y lo empecé a caminar

- Ah

- Ey, un golazo

- Ah

- Un golazo, un golazo. Encima llevé a todos personajes. Un golazo, ey

- ¿Cuántos eran Mono en total?

- Cinco

- Ah, bueno. Un 1.800.000. Buen botín mono, muy buen botín

- Sí

- De primera, b*ludo

- Zafa, zafa

- Sí, que no va a zafar amigo, que no va a zafar amigo, no tenés que pagar datero, nada.

- No, b*ludo, a mí me tienen que pagar

- Y bueno, por eso. Buenísimo b*ludo, buenísimo

- Ahora que se agarren los "coso" (sic)

- ¿Los quien?

- Y, los mismos de eso

- ¿Los quien?

- Los banquitos