En una audiencia imputativa llevada a cabo este viernes en la sede del Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe, la fiscal María Laura Martí fue imputada por tres delitos en el marco de la investigación por escuchas ilegales al teléfono del ministro de Seguridad provincial, Maximiliano Pullaro. Roberto Apullán, el otro funcionario judicial sospechado, no se presentó. “Lo que claramente se prueba aquí, es que en el caso de la intervención a mi teléfono fue ilegal”, declaró Pullaro luego de la audiencia. La fiscal imputada, por su parte, dijo que esta causa “es para tapar otros escándalos institucionales graves”.

La imputación

Según confirmaron fuentes judiciales, a la fiscal María Laura Martí le imputaron los delitos de falsedad ideológica de documento público, concurso ideal con abuso de autoridad e incumplimiento de deberes funcionales. Es en la causa por escuchas ilegales al ministro de seguridad de Santa Fe, Maximiliano Pullaro. La investigación de la causa la llevaron adelante los fiscales rosarinos Juliana González y Gustavo Ponce Asahad.

Según comentó la periodista Ivana Fux en Radio 2, la audiencia tuvo una ausencia significativa, la del fiscal Roberto Apullán, el otro acusado por las escuchas al ministro.

Otro dato llamativo fue que un grupo de trece fiscales no pudo ingresar para "apoyar" a la fiscal María Laura Martí, la investigadoras que fue imputada por haber intervenido de forma ilegal el teléfono del ministro de Seguridad.

En la audiencia que se llevó a cabo en la Fiscalía General de la ciudad de Santa Fe, sólo estuvo María Laura Martí. Roberto Apullán avisó con antelación que iba a tomar una licencia y en su caso la imputativa será reprogramada.

Además de Martí, en el lugar estaban los fiscales de Rosario Juliana González y Gustavo Ponce Asahad, los acusadores, y el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, con su abogado, Pablo Cococcioni, ya que es querellante en la causa.

Antes del inicio de la audiencia, un grupo de trece fiscales de diferentes jurisdicciones quiso entrar para conocer la acusación que pesa sobre su colega. Sin embargo, como los acusadores Ponce Asahad y González pidieron que se realice a puertas cerradas, se quedaron afuera.

El descargo del ministro

Una vez finalizada la audiencia, el ministro Maximiliano Pullaro hizo declaraciones contundentes a los medios: “Hoy, lo que claramente se prueba aquí, es que en el caso de la intervención a mi teléfono fue ilegal”. Y destacó que “los fiscales de Rosario entendieron que hasta el momento se cometieron por lo menos tres delitos”.

“En función y conforme a la investigación que vamos a seguir llevando adelante es probable que se les pueda achacar diferentes delitos o más delitos a los mismos, que hasta pueden tener una pena privativa de la libertad por la gravedad que los mismos tuvieron", anticipó el funcionario del gobierno santafesino. “Me constituí como querellante porque es importante que se conozca la verdad”, afirmó.

Pullaro siguió: “Para mí no es fácil, ni poco costoso, haber hecho una denuncia de esta característica contra dos fiscales. La podría haber dejado pasar y no constituirme como querellante y dejar todo en el marco de la impunidad, pero la verdad es que uno se compromete con mejorar las instituciones de la provincia de Santa Fe, y esto tiene una gravedad muy pero muy relevante", consideró.

"Siempre planteé que quería saber la verdad de lo que había sucedido. Sabemos que en este tiempo hemos avanzados en causas de corrupción, hemos tocado intereses de sectores oscuros de la policía que apartamos, denunciamos, hicimos encarcelar y en más de una oportunidad destituimos. Siempre quisimos saber cuál era el trasfondo de esta cuestión, quienes estaban detrás", remató Pullaro.

La defensa de la fiscal

María Laura Martí, quien fue imputada en libertad, también enfrentó los micrófonos una vez terminada la audiencia en la capital provincial. “Las evidencias son las mismas que yo considero que tengo a mi favor”, señaló. Y consideró que “hay una interpretacion ambigüa de una misma prueba”.

“Me reservé un par de cuestiones, indiqueé que esta investigación es para tapar otros escándalos institucionales graves”, denunció la fiscal Martín. “También he expresado que tengo testimonio para manifestar todavía”, confió.

Trascendió que Martín va a a solicitar una ampliación de esta audiencia imputativa para que puedan asistir los periodistas y para que se pueda escuchar los 300 cd's que, según su opinión, avalarían su investigación.

La causa

En una causa por fraude con horas extras de la policía, Apullán y Martín habían intervenido líneas de jefes de la fuerza, aunque en un llamado con el comisario Adrián Rodríguez apareció el titular de Seguridad y avanzaron por un supuesto tráfico de influencias para un ascenso.

Lo que se reprocha es que los funcionarios santafesinos, al pedir la intervención a un juez, no le dieron a conocer deliberadamente que la línea era o podía ser de Pullaro. "Se entiende que el juez fue inducido a error. Que no pudo hacer el debido control de legalidad", explicaron.

Así, sin una debida fundamentación y con una acusación que nunca prosperó, accedieron durante algunas semanas a información sensible sobre operativos e investigaciones de toda la provincia. Todo ello generó fuertes repercusiones en el ámbito político en la capital provincial.