La familia de Ana María Acevedo, una joven que murió luego de que en el Hospital Iturraspe de Santa Fe se negaran a realizarle un aborto terapéutico, le hará un juicio civil al Estado provincial. Para ello, como paso previo, las nuevas abogadas de los padres de Ana María iniciarán esta semana un recurso administrativo en el Ministerio de Salud, según adelanta una nota de la periodista Sonia Tessa publicada en el diario Rosario 12.

La joven, de 20 años, falleció el 17 de mayo pasado en el hospital Iturraspe de Santa Fe como consecuencia de un cáncer de mandíbula que no fue tratado porque los médicos se negaron a realizarle un aborto terapéutico, en una decisión refrendada por el comité de bioética del hospital en base a "razones religiosas y culturales".

"Queremos que queda claro que el gobernador Jorge Obeid y la ministra Silvia Simoncini dejan muchas deudas en cuanto a la salud de las mujeres. Se llevan la muerte de Ana María Acevedo", afirmó la abogada Lucila Puyol, que asumió la representación legal de Norma Cuevas y Haroldo Acevedo junto con Paula Condrac y Mirta Manzur. Las tres profesionales forman parte de la Multisectorial de Mujeres de Santa Fe, que acompañó a la familia Acevedo desde que el caso se hizo público.

Por la muerte de Ana María ya hay en marcha una demanda penal por homicidio culposo, que todavía no tiene imputados.

Para la abogada Puyol, citada en la nota de Rosario 12, el Estado santafesino "no atendió como correspondía a Ana María, en todos estos meses no esclareció lo ocurrido, y tampoco reglamentó los abortos no punibles para impedir que otra mujer vuelva a pasar por la misma situación".

Por eso, además de pedir en la Justicia que se hagan responsables por los daños y perjuicios causados contra Ana María, advirtió a las autoridades entrantes que "sepan que hay muchas cuestiones por resolver".

Después de pedir el aborto para salvar a su hija, cuando vivían en el hospital y sin recursos, los padres de Ana María recurrieron al abogado Germán Ulrich Lehmann, quien inició la demanda penal por homicidio culposo. Desde mayo, sólo presentó dos escritos, y tuvo poco contacto con la familia. Sí se reunió con el arzobispo de Santa Fe, José María Arancedo, para asegurarle que sus representados no querían la despenalización del aborto. Pero esa actitud inconsulta molestó a Norma y Haroldo.

El amplio poder que habían firmado le permitía al anterior abogado, por ejemplo, cobrar dinero en su nombre. La situación de la familia Acevedo es crítica. Sobreviven de changas y un plan social, que durante meses no cobraron, y además, se hicieron cargo de dos de los hijos de Ana María. Desde que decidieron revocarle el poder a Lehmann, el profesional los presiona, relata la nota de Rosario 12. Pero no responde las llamadas de las actuales abogadas, que quieren reunirse con él. "Nos parece importante solicitarle la rendición de cuentas que corresponde a todo mandatario, porque los actores de la causa son Norma y Haroldo", indicó Puyol.