La delegación de la Cancillería argentina llegará este martes a Holanda. La intención es representar al país cuando este jueves la Corte Internacional de Justicia de La Haya se pronuncie sobre la medida cautelar planteada por la Argentina en el diferendo por las papeleras que mantiene con el Uruguay. Mientras desde el gobierno nacional asumieron esta instancia con "cautela", funcionarios uruguayos sostuvieron que un fallo a favor de Argentina "sería desastroso".

El representante de la delegación uruguaya en el juicio que se lleva a cabo en el Tribunal Internacional de La Haya por el conflicto por las papeleras con Argentina aseguró que espera con "moderado optimismo" el fallo de ese tribunal. Aunque, según el diario uruguayo El Observador, el funcionario Gros Espiell, que además es embajador en Francia, destacó que una decisión adversa para su país sería "desastroso, ya que las medidas cautelares solicitadas por Argentina resuelven detener las obras hasta que La Haya pronuncie el fallo final que sería recién dentro de varios años".

De todos modos, Espiell, que se consideró "un firme defensor del medio ambiente", dijo que espera una decisión "justa y razonable" por parte del Tribunal internacional.

Por su parte, el Canciller Jorge Taiana fue quien decidió quiénes viajarían: la titular del área legal de la Cancillería, la embajadora Susana Ruiz Cerrutti, y el director del Instituto del Servicio Exterior de la Cancillería, Horacio Basabe. En La Haya se sumarán el embajador argentino ante los Países Bajos, Santos Goñi Marenco y los abogados Marcelo Kohen y Alain Pellet.

La Corte convocó para el jueves 13 a las 10 (5 hora argentina) a los gobiernos de Uruguay y Argentina, para responderles si acepta o rechaza el pedido argentino de suspensión de las obras o si adopta otra medida alternativa. En cualquiera de los casos, la decisión de la Corte, máximo órgano judicial de las Naciones Unidas, será vinculante para ambas naciones.

De todos modos, quedará pendiente la sentencia definitiva sobre el asunto de fondo que es la violación del Tratado del Río Uruguay, firmado entre ambas naciones en 1975, que se estima llevará cinco años.

El 4 de mayo, Argentina pidió formalmente a la Corte de Justicia de La Haya una medida cautelar que suspenda por 90 días las obras de construcción de las plantas que realizan las compañías Ence (España) y Botnia (Finlandia), en Fray Bentos.

La Corte hizo lugar al pedido argentino y el 8 y 9 de junio delegaciones de ambos países se presentaron en el Palacio de Justicia en el marco de las audiencias de alegatos y réplicas en la ciudad holandesa donde también funcionan otros organismos judiciales de las Naciones Unidas. Luego de ese procedimiento, la Corte de Justicia convocó a las partes para el jueves 13 para recibir su respuesta en La Haya.