Lo que iba a ser el tradicional aguante en la puerta de los Tribunales Federales de Rosario por el inicio del juicio por delitos de lesa humanidad Feced III, este jueves a la mañana, se convirtió en un acto de repudio a la decisión de posponer por tercera vez el comienzo de ese proceso.

Desde el espacio Juicio y Castigo Rosario realizaron una conferencia de prensa y radio abierta para resistir lo que denominaron “la destrucción del proceso de memoria, verdad y justicia conquistado por el pueblo argentino”.

Nadia Schujman, abogada de Hijos, remarcó que la suspensión se produjo el martes pasado “a dos días del inicio cuando todos estábamos preparados”. Señaló que para los testigos y víctimas de secuestros, torturas y desapariciones es costoso “preparar el cuerpo y el corazón para un juicio después de 40 años de esperar justicia y que te digan que eso no va suceder”.

“La mejor garantía de impunidad es la dilación de los juicios”, agregó la ex subsecretaria de Derechos Humanos de Santa Fe y vinculó la medida judicial a un contexto nacional en donde se impulsan proyectos para liberar genocidas y se pronuncian discursos negacionistas.

Sobre lo mismo hizo hincapié la diputada provincial Alicia Gutiérrez, quien enumeró que se busca “negar el genocidio, negar la cantidad de personas desaparecidas, liberar a los represores ya condenados por sus delitos de lesa humanidad” y esas acciones impplican un mensaje a las víctimas: “Cállense la boca porque les puede pasar algo y eso no lo vamos a permitir”.

Desde Hijos añadieron: “El Poder Judicial debe cumplir con el mandato constitucional de ofrecer justicia para las víctimas del terrorismo de Estado, que hace más de 40 años la reclaman, en lugar de administrar la impunidad para los genocidas”. Denunciaron que la Justicia “se alinea con el gobierno negacionista de Cambiemos para administrar la impunidad a los genocidas que deje de postergar los juicios”.