Los ingredientes básicos para elaborar una bomba biológica pueden encontrarse en Internet, según denuncia hoy el periódico británico The Guardian, ya que la secuencia genética del virus mortal de la viruela puede ser adquirida a través de la web. Al no existir ningún tipo de regulación que controle la identidad del comprador, la operación es fácilmente realizable. Así lo probó un periodista del diario, que compró una secuencia genética de dicho virus. The Guardian advierte sobre el riesgo que esto implicaría en caso de que se quisieran emplear por terroristas con conocimientos químicos. Además, debido a que la mayor parte de la población no cuenta con resistencia inmunológica contra este tipo de virus ya extinto, si diez personas se infectaran, la enfermedad se transmitiría a 2,2 millones más en un periodo de 180 días, asegura el periódico. Pese a que existen razones legítimas para que los investigadores puedan acceder al ADN de ciertos patógenos, con el objetivo de desarrollar vacunas o tratamientos para combatir el virus, el diario denuncia la falta de regulación a la hora de investigar la identidad del comprador, dado que se trata de una industria nueva. "Esta es la historia más preocupante que he oído en mucho tiempo. Claramente, existe un agujero que hay que solucionar mediante regulación o legislación", apuntó el diputado liberal demócrata Phil Willis, presidente del comité parlamentario de ciencia y tecnología. Por su parte, un experto en armas biológicas y químicas en la Universidad de Leeds, Alistair Hay, encargado de asesorar en este asunto al gobierno y a la policía, señaló su preocupación ante el hecho de que la empresa proveedora estuviera dispuesta a suministrar el ADN a direcciones privadas. Desde que se erradicara el ADN de la viruela hace 30 años, éste sólo ha existido en laboratorios.