Fernanda Blasco
¿Qué princesa es la que pierde el zapato? ¿Cómo se llamaba el mítico estudio de Andy Warhol?¿Cuántos hijos tenia Sarmiento? ¿Cuánto dura un partido de rugby? ¿Cuál es la capital de Islandia?
Aunque usted no lo crea, el adolescente obsesionado con su celular y el ejecutivo que parece trabajar con su Blackberry comparten la misma pasión. Si no participan de la charla que mantienen y parecen abstraídos, probablemente es porque están jugando a Preguntados.
El juego ya tiene dos millones de descargas (Android e iOS) en Argentina y siete millones en América Latina, según cifras de TN Tecno.
Para los pocos que aún no cayeron en la tentación, pero que seguro lo oyeron nombrar, va la explicación: es un juego gratuito tipo carrera de mente que propone competencias virtuales con amigos o desconocidos, para saber quién es más cerebrito. Lo inventó un ingeniero argentino de 28 años llamado Máximo Cavazzani, responsable de la empresa Etermax.
Fue lanzado en octubre del año pasado y hoy se convirtió ya en "un hito", según reconoce su creador.
El esquema es simple: se plantean preguntas con opciones múltiples y se debe contestar rápido.Y como todo juego, tiene comodines.
Se puede pedir estirar más el tiempo de respuesta y eliminar dos de las opciones, entre otras cosas. Por supuesto que se puede pagar para tener el camino más fácil, pero incluso si no se abona un peso las cosas marchan bastante bien.
Hay diversión para todos. Están los que saben mucho y lo disfrutan. Los que saben algo y dan batalla igual. Y están los que no saben nada y tienen como desafío encontrar vía Google la respuesta antes de que llegue el gong que indique que se acabó el tiempo.
¿Cuál es el secreto? Hay varios. Genera tanta adicción como el Candy Crush (sí, ese jueguito que hasta hace poco era éxito y hoy pocos se acuerdan, porque se le terminaron los cinco minutos de fama de internet). Es que hasta que el oponente no juegue, no queda otra que esperar. Claro que se puede tener más de una partida simultánea, lo que entretiene más.
Pero además, Preguntados da la opción de aprovechar el "minuto libre" que se tenga mientras se hace otra cosa, ya sea durante un viaje de colectivo, mientras se espera que algún personaje aburrido termine de hablar en una reunión, en la hilera del rapipago. Porque en realidad, se juega en el tiempo que se tarda en responder una pregunta. O dos, o tres, las que se quiera.
Y, otra vez, el tema de la adicción: ese "minuto" que se juega se multiplica en el día. Y se termina jugando todo el día, a veces sin percatarse.
"Cenicienta". "Dos". "Factory". "Ochenta minutos". "Reijavik". Son las respuestas de las preguntas del inicio.
Para los adictos de Preguntados, que seguro se quedaron pensando. No vaya a ser que justo les toque alguna de esas preguntas en alguna de las partidas que están jugando precisamente... en este momento.