Un joven salvó su vida de milagro al ser asaltado en Villa Gobernador Gálvez. Es que el ladrón, que pretendía robarle el celular, le disparó a la cara, pero como la víctima puso un brazo para taparse y la bala le quedó incrustrada en la mano, sólo sufrió una herida.

El muchacho herido relató en El Tres que estaba saliendo de su casa en auto para ir a trabajar cuando notó que había alguien atrás del coche. Salió del mismo porque pensó que era el padre. Pero no.

Un joven de unos 19 años, con campera y gorra, le exigió pistola en mano que le diera el celular. El se cubrió la cara con un brazo y el delincuente disparó.

El tiro le dio en la mano y, para su suerte, quedó allí, lo que salvó su vida. Luego del disparo, el delincuente huyó.

El caso parece similar al robo en el que fue asinado, en la zona sur de Rosario, Nahuel Ciarroca.