El momento más tenso del debate de candidatos a diputados nacionales fue el reclamo (inflamado hacia al final) del ministro de Producción Luis Contigiani al macrista Albor Cantard por los recursos que el gobierno nacional prometió para asistir a los tamberos santafesinos afectados por la crisis hídrica del verano pasado. Ambos se trataron de mentirosos; y este lunes el propio gobernador Miguel Lifschitz tiró más leña al fuego: dijo que la ayuda nacional todavía no llegó y que por eso muchos tamberos no pudieron superar la crisis de enero.

“El fondo de emergencia tenía que llegar en febrero, en marzo a más tardar. Los (tamberos) que tuvieron problemas ya están en la lona y los que pudimos asistir se pudieron salvar. Esa es la pura verdad”, aseguró Lifschitz desde el estudio de Radio 2, en diálogo con el programa Radiópolis que conduce Roberto Caferra.

Tras las lluvias del verano, muchos productores lecheros enfrentaron serias dificultades para reanudar su actividad y entonces –explicó el gobernador– se proyectó un fondo de asistencia de 400 millones de pesos, de los cuales 150 iba a poner la Provincia y los otros 250, la Nación pero a préstamo.

“Hicimos la ley, el fondo y comenzamos a repartir nuestros 150 millones de pesos pero llegaban los fondos de Nación y pusimos 100 más”, reconstruyó Lifschitz el derrotero cuyo último avance fue la firma en septiembre pasado de un convenio entre la Casa Gris y el gobierno nacional para el envío del dinero prometido en el verano.

Ese convenio fue el que Cantard usó para tratar a Contigiani de mentiroso en el debate pero para Lifschitz se trata de un acuerdo vacío y anacrónico porque la Casa Rosada no mandó el dinero prometido y porque “estamos a octubre y la emergencia fue en enero”.

“Era un fondo de emergencia tenía que llegar en febrero, en marzo a más tardar. Los que tuvieron problemas ya están en la lona”, enfatizó.