La hipótesis de que el ataque a balazos a un patovica en un boliche del centro de la ciudad está vinculado a la interna de la barra brava de Newell´s Old Boys se reforzó este lunes, luego de un par de allanamientos que realizó la policía. Y el Panadero Ochoa quedó muy pero muy comprometido.

Según informó el periodista de Radio 2 Héctor López, uno de los procedimientos se realizó en la casa del supuesto líder de la barra, el Panadero Ochoa, en Pueyrredón al 3700, y allí se encontraron una réplica de un fusil M 16 con dos cargadores y una pistola Bersa, que según testigos son similares a las armas que llevaba el agresor. Mientras que en otro procedimiento, realizado en Villa Gobernador Gálvez en la casa de quien supuestamente acompañaba a Ochoa, se secuestro una moto enduro similar a la que se uso en el ataque. Ninguno de los dos sospechosos fue encontrado en sus casas por el personal de las División Judiciales. 

El patovica fue baleado este domingo a la madrugada en la puerta del pub donde trabaja, y según testimonios el ataque provino de reconocidos miembros de la hinchada leprosa. El herido sería parte del grupo que tiempo atrás sacó de la cancha al Panadero Ochoa, en una pelea que incluso fue filmada por las cámaras de seguridad del club.

Según informaron fuentes policiales, Sebastián Rolando González, de 35 años, recibió un disparo en una pierna cuando se encontraba en el ingreso del local Athypico (Balcarce al 200) y debió ser trasladado en ambulancia al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde fue intervenido para retirarle la bala. Está fuera de peligro.

De acuerdo a declaraciones que manejan quienes investigan el caso, cerca de las 2 de la mañana pasó por el lugar una moto con dos ocupantes y uno abrió fuego contra el custodio, que resultó herido en un muslo derecho y el proyectil le quedó alojado en un glúteo.