Pablo Gavira

Barrio Belgrano cambió su aspecto hace unas semanas. El fanatismo, el folclore, el amor incondicional a los colores de una camiseta hizo que a varios simpatizantes centralistas les agarre el furor por el pincel y dejar a cada paso – desde Mendoza al 6600 hasta Mendoza al 7700– la marca de los colores del canalla en todas las columnas de la zona como así también las paredes de los distintos domicilios de ese popular barrio.

Algunos vecinos dicen que no es la primera vez que ocurre que hinchas de Newell´s y Central se manifiesten con ese tipo de actividad, pero la mayoría coincidió que es la primera vez que lo hacen en todas las cuadras y en un trayecto tan amplio.

A simple vista puede quedar en una colorida expresión de amor hacía un club, pero en realidad muchos mobiliarios son dañados con esas pinturas sinteticas que son dificiles de sacar. Algunos habitantes dijeron inclusive que existió enfrentamientos a balazos entre hinchas de ambas instituciones.

Ahora habrá que esperar si alguien de la Municipalidad recorre esa artería para tapar los que hicieron los hinchas del canalla o si los leprosos borrarán las huellas con los colores del equipo del parque.