Los sanatorios y clínicas rosarinas amenazaron con cortar el servicio a prepagas y obras sociales si no se produce una actualización en los aranceles que pagan por las prestaciones médicas.
La advertencia partió de la Asociación del Clínicas y Sanatorios, entidad que sostiene que hay una “inequitativa distribución” de los ingresos ya que –según le dijo Rodrigo Sánchez Almeira al periodista de Radio 2 Pablo Procopio–los costos aumentaron un 200 por ciento desde 2001, también lo que perciben las prepagas y las obras sociales, pero los aranceles han quedado “retrasados, en un 90 por ciento”.
Según Sánchez Almeira, esto provocó una verdadera “eclosión” y hoy es “imposible seguir manteniendo estos valores”.
Así las cosas, lo que reclama la Asociación de Clínicas y Sanatorios es una recomposición del 30 por ciento en los aranceles y puso un plazo: el 1º de octubre. Si no hay respuesta positiva al reclamo, se “fijarán precios en forma unilateral” y eventualmente se podrían cortar servicios, lo que obligaría a los pacientes a pagar de su bolsillo las prestaciones.
La advertencia partió de la Asociación del Clínicas y Sanatorios, entidad que sostiene que hay una “inequitativa distribución” de los ingresos ya que –según le dijo Rodrigo Sánchez Almeira al periodista de Radio 2 Pablo Procopio–los costos aumentaron un 200 por ciento desde 2001, también lo que perciben las prepagas y las obras sociales, pero los aranceles han quedado “retrasados, en un 90 por ciento”.
Según Sánchez Almeira, esto provocó una verdadera “eclosión” y hoy es “imposible seguir manteniendo estos valores”.
Así las cosas, lo que reclama la Asociación de Clínicas y Sanatorios es una recomposición del 30 por ciento en los aranceles y puso un plazo: el 1º de octubre. Si no hay respuesta positiva al reclamo, se “fijarán precios en forma unilateral” y eventualmente se podrían cortar servicios, lo que obligaría a los pacientes a pagar de su bolsillo las prestaciones.