Sabrina Ferrarese

“Flaco, metéte adentro del cine así estás más calentito”. Daniel Grecco, el gerente de la compañía Monumental, no aguantó más y así se dirigió a un vendedor ambulante que en la puerta del cine de calle San Martín y San Luis ofrecía a viva voz: “Harry Potter, Shrek y Ratatouille: tres por diez pesos”. Amén de que esos títulos se estrenaban en la sala al día siguiente, Grecco sintió que “era demasiado”. “Sé que venden CD’s y DVD’s en los quioscos y en los puestos pero que los vendan en tus narices, eso te duele”, lamentó en contacto con Rosario3.com

De acuerdo a su registro, elaborado en conjunto con otros empresarios del rubro e incluso, con los dueños de videoclubes, “la venta trucha es constante en toda la ciudad, sobretodo en el centro. Muchos arman un puesto, otros venden de forma encubierta, debajo de una frazada o llevan los discos en mochilas”, detalló. En consecuencia, adelantó: “Estamos pensando con otros empresarios cómo manejarnos. Quizás conversar con algunos concejales o con el mismo intendente para que nos den una mano porque la GUM los saca pero al rato vuelven”.

Se los ve con sus cajitas imitadoras desplegadas en un paño. Música, películas y videos juegos al alcance de todos los bolsillos y ya nadie piensa en copias, en mercado negro, menos en la cárcel. Funciona con la misma naturalidad de las cosas originales, la piratería ambulante es más cierta que ilegítima a los ojos acostumbrados del consumismo y el quiero ya.

De acuerdo al director de Control Urbano, Osvaldo Lafatigue, “la mayoría de los que venden en la ciudad traen los discos de la Salada”. Lo mismo aseguró Claudio Canalis, al frente de la Guardia Urbana Municipal (GUM): “No graban acá, los traen mayoristas de Buenos Aires”. Ambos hacen referencia a la feria ilegal más grande de Latinoamérica de venta de artículos por demás de diversos que en la zona de Lomas de Zamora de la Capital Federal congrega cada fin de semana a miles de personas de todo el país, incluso de Rosario.

Un vendedor con años en el negocio –quien prefirió guardar su identidad –confió a Rosario3.com: “En Rosario se graba, pero para el mercado minorista, sólo hay dos o tres que pueden responder a pedidos mayoristas, pero la cosa pasa por Buenos Aires y es una cuestión de costos”, reveló.

“Acá conviene más vender mil CD’s a 5 pesos o a 3 por 10, que te deja una ganancia de más o menos 3 mil pesos, que vender por mayor con los precios de Buenos Aires donde podés conseguir cada disco a 1,.40 que para ganar 3.000 tenés que grabar 15 veces más”, analizó.

“La gente que hace de esto un negocio rentable en Rosario serán cinco”, arrojó y afirmó: “El que más gana es el que vende en la calle, y es el que más riesgo corre porque hay mucho control, mucho secuestro de mercadería. Fijáte que en el centro no se ven puestos grandes, sino más bien con mochilas o bolsos de mano”, terminó.