La mujer que fue asesinada a tiros en la noche de este lunes en Melián al 6300, en barrio La Granada, era la abuela de Dylan Tomás Baldón, la “mano derecha” de Luciano Cantero, hijo del asesinado jefe de Los Monos que está preso por liderar una violenta estructura criminal en la zona sur. Esa información ya llegó a manos del fiscal Adrián Spelta, que investiga si el homicidio tiene alguna vinculación con ese lazo familiar entre la víctima y el joven de 18 años que está preso por múltiples delitos.

Ermelinda Zalazar tenía 66 años y recibió al menos tres disparos en la cabeza mientras estaba en una granja que tiene 30 años en el barrio, según informó el periodista Ariel Borderi desde el móvil de Radio 2.

A Zalazar la atacaron dos sicarios que se bajaron de un auto gris que aún no fue identificado. Después de ejecutarla, dejaron escrito en la cinta asfáltica un número de celular seguido del siguiente texto: “Llamen XD”.

Un número de teléfono escrito con tiza en la calle del crimen (Alan Monzón/Rosario3)

La mujer falleció en el hospital Roque Sáenz Peña por la gravedad de las heridas que presentaba. Su muerte elevó la cifra de asesinatos a 224 en lo que va del año en el departamento Rosario, según datos del Observatorio de Seguridad Pública.

El nieto de Ermelinda es Dylan Tomás Baldón, alias “Capocha”, uno de los 28 presuntos integrantes de la banda de “Lucho” Cantero, que incluso quedó filmado mientras festejaban la Navidad del año pasado a puro tiro en la terraza de una casa de La Granada.

Baldón cayó el 29 de agosto pasado, cuando fue detenido en un procedimiento policial con dos pistolas, una moto robada y 73 gramos de cocaína. Ya fue imputado por esas armas y por el vehículo, pero ahora la fiscal Marisol Fabbro le atribuyó ser el “organizador” de la presunta asociación ilícita del hijo del “Pájaro” Cantero.

A la banda de “Lucho”, la fiscal Fabbro le atribuyó los delitos de asociación ilícita, extorsiones, balaceras y al menos tres homicidios: el de Damián Gómez (22 de junio de 2021), Ulises Gastón Gamarra Urquiza (23 de febrero pasado) y Luciano Roberto Muscio (3 de julio pasado).

La fiscal comenzó a imputar a “la nueva generación de Los Monos” el pasado jueves. Son tantas personas y evidencia, que la acusación se retoma este martes en el Centro de Justicia Penal, ya que todavía no terminó.