Familiares, amigos, compañeros y alumnos de la docente de 40 años que está internada en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) con quemaduras, organizaron una movilización frente el hospital este lunes a las 19 para pedir Justicia por su caso. Ayer, la pareja de la mujer quedó imputado por el hecho.

El hombre acusado de haber prendido fuego a su mujer la semana pasada en Rosario fue imputado este domingo y quedó preso de manera preventiva, mientras que la víctima continúa internada grave.

La imputación de la fiscal Gisella Paolicelli contra Carlos O. M., de 48 años, fue por "tentativa de homicidio agravado por violencia de género" y el juez Gonzalo López Quintana lo dejó en prisión hasta por lo menos el 28 de octubre próximo, mientras avanza la investigación.

El acusado fue detenido el viernes último en una casa de Ayacucho al 1700, barrio República de la Sexta, mientras que su pareja, una docente de 40 años, permanece en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) con severas quemaduras en casi todo el cuerpo.

A Carlos O. M., que también es maestro, se le imputó además el delito de “tenencia de arma de fuego prohibida en grado consumado todo en concurso real” por una pistola calibre 22, si bien en el ataque a la mujer no habría rastros de su uso. En su domicilio también se secuestraron tres cartuchos y una vaina servida del mismo calibre calibre.

Ataque bestial

 

El ataque de género se produjo el pasado miércoles por la noche, cuando, tras una discusión, el acusado roció con alcohol y le causó a la mujer “lesiones térmicas de gravedad en diversas partes del cuerpo”, según costa en la causa.

Noelia, la víctima, tiene quemaduras en el rostro, en la cabeza, en los brazos, en las piernas y en el tórax. Está intubada en el Heca por tener las vías respiratorias afectadas.

En un primer momento, la mujer ingresó al Heca bajo la sospecha de "intento de suicidio" porque la pareja había llamado a la Policía dando esa información. Sin embargo, pericias llevadas adelante por orden de la fiscal Paolicelli lograron establecer que las lesiones fueron producidas por un tercero.