Le fabrica a varias heladerías de la ciudad y ahora sale al ruedo con marca propia

Luego de trabajar más de diez años en el rubro junto a su hermano, decidió abrirse camino por su cuenta e inaugurar una tienda de helados boutique en pleno Pichincha

     Comentarios
     Comentarios

Hace once años, Leandro y Federico Parodi empezaron a fabricar helado en el subsuelo de la actual heladería Monk's, ubicada en calle Mitre y Tucumán. El buen rendimiento que obtuvieron les permitió crecer con nuevo equipamiento y capacidad en frío, pudiendo perfeccionar los procesos de producción en la planta y lanzándose a elaborar este producto para terceros.

Sin embargo, los cambios que viene sufriendo el rubro heladero en la ciudad, con una creciente competencia y propuestas cada vez más segmentadas según el público, motivaron a los hermanos a separar sus caminos. Mientras que Federico quedó a cargo de la gestión de Monk's, Leandro apostó por una marca propia con la cual acaba de inagurar su primer local en Rosario, en pleno corazón de barrio Pichincha.

Se trata de Enola, una heladería boutique que abrió sus puertas en calle Jujuy 2235, a escasos metros de Oroño, y para la cual Parodi debió remodelar un viejo local venido a mneos y ocupado antes por una verdulería. El negocio sigue los lineamientos de un formato que cobró lugar en el último tiempo dentro del sector y que consiste en tiendas montadas en pocos m2 y con una menor cantidad de sabores. En el caso de Enola son 16 y se encuentran a la vista del público, colocados en una exhibidora de origen italiana.

"La idea es poder hacer más de lo que me gusta que es formular y fabircar helado", señaló Parodi a Ecos365. Según contó, el proyecto de esta una nueva marca nació de la posibilidad de apuntar a nuevos clientes y ofrecer un producto distinto al que venían fabricando: "llegamos a un punto donde cambió mucho la realidad del helado, este se puso de moda y empezó a ser hasta un objeto de status entoces diversificamos el público".

En este sentido, Parodi señaló que mientras Monk's apunta a una propuesta masiva y familiar, Enola se dirige a un segmento más premium y, si se quiere, exigente, "personas que estén buscando probar el verdadero sabor del gelatto italiano en la ciudad". Si bien ambos helados comparten la planta de fabricación y la materia prima, cambian las recetas y los gustos que ofrece cada marca.

"En Enola trato de trabajar gustos más exóticos y otras formulaciones de helado diferentes a las de Monks aunque la materia prima que usamos es la misma y de una excelente calidad", agregó el empresario y contó que en unos días ya se podrá empezar a pedir por delivery a través de la plataforma PedidosYa.

Vale destacar que el público que se dirija al local podrá encontrar en el mismo, sabores que van desde el pistachio italiano, pasando por el sambayón, variedades de chocolates, gustos basados en tortas como el cheescake y el tiramisú, más otras cremas inspiradas en recetas del país europeo.

En cuanto a seguir las tendencias que se vienen dando en el sector heladero, donde las marcas apuestan a copar con sus sucursales una gran cantidad de zonas en la ciudad y alrededores, Parodi señaló que no tiene el pan de expandirse, al menos por el momento. "Más allá de que siempre está la posibilidad de abrir nuevos locales, dudo que se pueda replicar nuestro modelo de negocios con una franquicia por cuestiones de volumen y calidad", concluyó.

Comentarios