Startup rosarina logró abaratar 20 veces estudio del código genético y sumó socios de Silicon Valley

Su tecnología le permite obtener información específica de cualquier ser vivo y desarrollar soluciones a medida, a menor costo y mayor velocidad

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Todo ser vivo tiene un código genético que lo identifica como tal y explica sus características y funcionamiento. La secuenciación genómica es la tecnología con la cual se lee ese código y se lo puede imprimir para su estudio, lo que permite aplicar soluciones específicas para cada caso. El problema es que hasta ahora estas impresiones tienen ciertas demoras y un costo elevado. Una startup rosarina diseñó un método para reducir 20 veces su valor y agilizar notablemente la entrega de resultados. Esperan en un año tener listas aplicaciones únicas en el mundo que tendrán un alto impacto en medicina y en el agro.

“Con la pandemia tuvimos la posibilidad de poner en práctica lo trabajado y validado en la academia y empleamos nuestra tecnología para secuenciar el covid-19”, comenzó diciendo Elizabeth Tapia, CEO de Argentag. A partir de su desbloqueador, en vez de secuenciar a un solo ser vivo, pudieron secuenciar a varios a la par, achicando notablemente costos e incrementando la velocidad. Esta tecnología, creada en laboratorios rosarinos, les facilitó la secuenciación de muchas muestras del virus en paralelo.

“El coronavirus tiene 30 mil letras, entra en 8 hojas A4 en letra normal. Ese código indica de qué variante se trata, y eso puede hacer la diferencia”, agregó en diálogo con Ecos365. Pero más allá de los virus, esta metodología sirve para analizar el código de todo ser vivo, con infinidad de aplicaciones, como la medicina, los cultivos, suelos y el ambiente, entre muchas otras. “Se trata de información con un altísimo nivel de detalle que permite tomar decisiones para la provisión de múltiples productos y servicios”, manifestó Tapia.

Así como en el paradigma digital todo está codificado con ceros y unos, en la biología todo termina con las letras ATCG, y para llegar a eso están las plataformas de secuenciación. “Nosotros tomamos esto que ya existía y lo optimizamos de manera tal que sea más accesible para empresas instituciones o gobiernos de todo el mundo, porque nuestra mirada es global”, manifestó por su parte Leandro Ciappina, COO de Argentag, firma de biotecnología pero que tiene la particularidad de cruzar a biotecnólogos con ingenieros electrónicos y moleculares, informáticos, diseñadores de aplicaciones y expertos en administración de empresas.

Su desarrollo fue muy bien visto por la aceleradora GridX, que incubó, pulió y potenció la idea, hasta darle el perfil de negocios requerido. Pero además despertó interés en Estados Unidos, donde el fondo de inversión Draper University de Silicon Valley se sumó como partner, lo que constituyó un enorme espaldarazo a la startup rosarina para llegar al primer mundo y hacerse de una red de contactos de alto valor agregado. “Si bien tenemos algunos clientes como el INTA de Balcarce, actualmente lo que buscamos es validar nuestra tecnología y adaptarla a las necesidades de las empresas, hasta tanto estén los resultados de laboratorio de dos proyectos de alto impacto en los que estamos trabajando”, sostuvo Ciappina.

Nosotros tomamos esto que ya existía y lo optimizamos de manera tal que sea más accesible para empresas instituciones o gobiernos de todo el mundo, porque nuestra mirada es global”, dijo Ciappina

Se trata de apps específicas para el agro y la medicina de precisión, verticales en los cuales harán foco en esta etapa inicial y para los que buscarán partners estratégicos a escala global. ”En un año tendremos los resultados definitivos, pero los indicadores nos dicen que vamos por muy buen camino”, se entusiasmó y agregó que también están en conversaciones para sumar a un importante socio de genómica.

“Lo que estamos haciendo es buscar soporte, porque queremos ser una empresa global y abrir las puertas de los mercados más grandes”, dijo. Mientras tanto siguen trabajando en el laboratorio de biología molecular del Acuario Río Paraná, y más allá de que proyectan dejar una sede fija en Estados Unidos para tener acceso directo a ese mercado, no se irán de Rosario. “Esto nos dará la posibilidad de generar en la ciudad empleo de calidad, que es muy importante porque acá hay recursos humanos muy capacitados”, cerró Tapia.

Además de Ciappina y Tapia, integran Argentag Pilar Bulacio (CTO), Sofía Lavista (Dir. Procesos), Ignacio Labari (Dir. Laboratorio) y Joaquín Ezpeleta (Dir. Ingeniería).

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