Luego de las denuncias y las repercusiones por abusos sobre un grupo de adolescentes, el juez Hernán Postma, titular del Juzgado de Instrucción Nº 11, separó temporalmente de sus funciones a los dos superiores de turno en la comisaría 14ª.
Según le informaron fuentes policiales a Rosario3.com, una veintena de agentes de la seccional de Marcos Paz al 6600 y del Comando Radioeléctrico deberán comparecer en los Tribunales y prestarse a distintos procedimientos en los que las víctimas, adolescentes de entre 12 y 18 años, podría identificarlos como quienes estuvieron en la madrugada del 24 de agosto y los desnudaron y golpearon.
Todos los empleados de la fuerza policial serán, al menos, fotografiados en el marco de una investigación por la que ya fue secuestrado el libro de guardia de la seccional en cuestión.
Reacciones
Una vez que el hecho tomó estado púlico, el gobernador Antonio Bonfatti expresó que habrá “sanciones ejemplares si hay comportamientos de este tipo”. Asimismo, recomendó a los ciudadanos que ante cada situación similar debe realizarse la denuncia porque “van a tener el respaldo del gobierno y la Justicia”.
Bonfatti se sumó a las declaraciones que más temprano había hecho el vicegobernador Jorge Henn sobre el caso. “Este gobierno no va a dudar en mandar a disponibilidad a los que no entiendan que este tipo de acciones no tienen lugar en la provincia”, había dicho el radical.
Horas antes, desde el Concejo Municipal pidieron colocar cámaras en comisarías para monitorear el accionar de los policías para impedir que se generen actos de corrupción o se cometan excesos.
Qué pasó
Esta semana, las familias de un grupo de chicas de entre 12 y 18 años fueron a los Tribunales a realizar una presentación porque aseguran que en la comisaría 14ª las desnudaron y “les pegaron cachetadas y patadas e incluso una de las nenas, que sufre diabetes, se descompuso y la obligaron a limpiar su propio vómito”.
Tras el suceso, la niña diabética permaneció varias horas bajo observación en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca).
En la región
Mientras en Rosario aumentaba el rechazo y la solicitud de medidas por la denuncia, este viernes una mujer de la localidad de Fuentes aseguró que, en Casilda, la detuvieron y la golpearon salvajemente sin motivo alguno durante un operativo de tránsito.
Ante las cámaras de Día 7 -imágenes que reprodujo De 12 a 14 (El Tres)- la mujer sostuvo que le dieron “puñetes en el rostro y patadas en el estómago” hasta que escupió sangre. “No me mataron por milagro de Dios”, concluyó.