Un joven de 21 años fue asesinado de un tiro en la cabeza en una de las zonas más calientes de la ciudad: la suroeste.
En la zona de Rouillón al 3600 –concretamente en Quinta Biselli al 5600– se escucharon en la noche del jueves un par de explosiones y cuando los vecinos salieron a ver qué pasaba se encontraron con un muchacho herido.
Llamaron a la policía, pero cuando el móvil del Comando Radioeléctrico llegó al lugar el joven ya había muerto.
Fuentes policiales dijeron que los investigadores que fueron inmediatamente después al lugar no encontraron testigos que pudieran contar cómo había sido el homicidio.