Las calles de la ciudad se quedaron sin control. Los inspectores de tránsito iniciaron este miércoles a la mañana una medida de fuerza que incluye asambleas y suspensión de actividades desde las 10 de la mañana. El paro continuará hasta este jueves a las 7. Y durante la jornada se sumó una amenaza de municipales dedicados a tareas de inspecciones que reclaman mayor seguridad.
Según informó el periodista de El Tres Pedro Levy, la medida en Tránsito es en demanda de mejores condiciones laborales: piden uniformes y que se cumplan recategorizaciones, entre otros puntos.
Sobre la ropa de trabajo se detalló que no les entregaron las prendas de invierno y estaba demorada la licitación de los uniformes de verano.
Cerca del mediodía, los inspectores se declararon en estado de asamblea permanente y decidieron continuar la medida hasta este jueves a las 7.
Por el paro, permanecía cerrada la Dirección de Tránsito municipal de Moreno y Ocampo donde se concentraron los agentes para realizar las asambleas. Los trámites que se realizan en esa repartición, como la entrega del carnet de conducir, quedaron suspendidos y los turnos serán reprogramados.
La medida de los inspectores coincidió este miércoles con un corte de calle de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) frente a la sede local del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, en Sarmiento y San Lorenzo.
Si bien esa protesta de la CCC se levantó, algunas zonas de la ciudad presentaban problemas de circulación este mediodía.
Sin policías, no habrá inspecciones
Por su parte, el secretario adjunto del Sindicato de Trabajadores Municipales de Rosario, Antonio Ratner, sumó otro reclamo a una jornada complicada: es por los empleados dedicados a fiscalización e inspección, que exigen garantías para salir a las calles.
“Ya lo comunicamos a la Secretaría de Gobierno: de ahora en más, si no son con presencia policial, las inspecciones no se van a realizar”, dijo tajante el dirigente a Telenoche (El Tres).
adelantó que este jueves, el sector mantendrá una reunión con autoridades policiales, donde plantearán “la eliminación de trabas burocráticas para poder contar con servicios adicionales” para llevar a cabo las tareas de los agentes, que, según indicó, son más de mil en la ciudad.
El reclamo afecta a áreas como la Guardia Urbana Municipal (GUM), Control Urbano, Inspección General y Tránsito.