Rosario Central no supo definir un partido que parecía tener en la palma de su mano. Pero la culpa de lo que fue finalmente 1-1 ante Tigre recayó, en el criterio de la gran mayoría de los hinchas, sobre Sebastián Abreu.

Es que el delantero uruguayo tuvo, a los 24 minutos del segundo tiempo y con el encuentro 1-0, la chance de liquidar la historia con un penal que le cometieron a Acuña. El oriental, otrora especialista, no pudo engañar a Javier García y a la postre, ese yerro provocó que el Matador siguiera vivo para alcanzar el empate.

Pero más allá de todo análisis puntual sobre lo acontecido anoche en el Gigante, lo que preocupa es la escasa efectividad centralista para los disparos desde los doce pasos. Es que la Academia falló cuatro de los siete penales con los que contó en lo que va de la temporada.

Abreu tiene registro positivo con tres concreciones y dos ejecuciones con triste final, mientras que los restantes disparos fueron fallados por Nery Domínguez y Federico Carrizo. Anoche, el encargado de patear si no estaba Abreu en cancha era Donatti. Pero el Loco tomó el balón a pura confianza, con el final que ya todos conocemos.

Repasando, los disparos con los que contó y su respectiva resolución fueron:

Torneo Inicial

Fecha 4, 1-0 a Godoy Cruz, gol de Sebastián Abreu ante Carranza.

Fecha 5, 1-2 ante Colón, el propio Abreu lo convirtió ante Montoya.

Fecha 10, 2-1 a Lanús, erró Nery Domínguez.

Fecha 14, 3-2 a Atlético Rafaela, dos penales errados: Carrizo y Abreu (ambos los atajó Conde).

Fecha 19, 2-1 a Argentinos Juniors, gol de Abreu ante Migliore.

Torneo Final

Fecha 7, 1-1 con Colón, Abreu falló ante la intervención de García